
Carteles de candidatos al Parlamento en Ulán Bator, capital de Mongolia. Captura de pantalla tomada del video «Mongolia tiene elecciones en medio de oposición débil, escándalos de corrupción y frustración ciudadana» del canal de YouTube de Al Jazeera en inglés. Uso legítimo.
El 28 de junio, se llevaron a cabo las elecciones parlamentarias en Mongolia, en las que el Partido Popular de Mongolia ganó y obtuvo 68 de los 126 escaños en el Gran Jural del Estado, el parlamento unicameral del país. Esta victoria sumará cuatro años de gobierno a los ocho ya que lleva el Partido Popular.
El 69.4% de los votantes participaron, y el resto se dividió entre cuatro partidos. El Partido Democrático obtuvo 42 asientos, el Partido Hun (Humano) obtuvo ocho. De otro lado, la Coalición Nacional y el Partido Coraje Civil Verde obtuvieron cuatro escaños. Así, lograron un gran hito en la política de Mongolia. Por primera vez en la historia del país, cinco partidos ganaron escaños en el Parlamento.
Este video de YouTube muestra los resultados electorales.
Durante décadas, la política de Mongolia ha sido dominada por dos partidos principales, el Partido Popular de Mongolia y el Partido Democrático. El primero es heredero del Partido Revolucionario del Pueblo Mongol, fundado en 1920. Durante los casi 70 años de comunismo en Mongolia, el Partido Popular era el único partido del país.
En 1990, Mongolia se convirtió en un país democrático con una economía de libre mercado, cambió su panorama político y permitió que surgieran muchos partidos políticos. En 2000, cinco de esos partidos se unieron y formaron el Partido Democrático. Gracias a esta unión, Mongolia ha sido una república parlamentaria, lo que resalta la importancia de las elecciones parlamentarias en la conformación del poder legislativo y el ejecutivo.
En los últimos 34 años, hubo nueve elecciones parlamentarias. Muchos testigos las consideraron libres e imparciales. El Partido Popular ha sido una fuerza dominante durante este periodo porque ganó seis elecciones gracias a su consolidada estructura y organización, la gran cantidad de miembros y una posición establecida en ámbitos rurales.
El Partido Democrático ganó dos veces, y las elecciones de 2004 dieron lugar a un gobierno de coalición. El descenso de la participación electoral en estas votaciones han sido una corriente notable y preocupante. En las últimas elecciones se registró la participación de un 69.5% de electores, la más baja desde su índice más alto en 1990, cuando fue de un impactante 96%. El porcentaje ha estado disminuyendo desde 1990.
Los constantes cambios a la ley electoral, que confundieron y generaron sospechas entre los votantes, han sido un gran factor para esta disminución. Mongolia ha alternado entre sistemas electorales mayoritarios, pluralista (mayoritario uninominal) y paralelo mixto en ocho de nueve elecciones.
El hecho de que los partidos gobernantes aprobaran estos cambios en años anteriores a las elecciones dio a entender que los hicieron personas interesadas en incrementar sus posibilidades de ser reelectas, algo que debilitó la confianza ciudadana en el proceso electoral. Un claro ejemplo fue el recién aprobado sistema de voto en bloque, que se utilizó en las elecciones de 2020 y ayudó al Partido Popular a ganar 61 de los 76 escaños, a pesar de haber recibido menos de la mitad del total de los votos.
El último cambios fue en mayo de 2023, cuando la cantidad de parlamentarios aumentó de 76 a 126, y se aprobó un sistema electoral mixto para garantizar la proporcionalidad y representación.
Este video de YouTube habla sobre el nuevo sistema electoral.
Los resultados de este nuevo sistema fueron significativos. La mayoría absoluta del Partido Popular se transformó en minoría tras obtener solo el 54% de los escaños, y los otros cuatro partidos fortalecieron sus posiciones o se establecieron en el Parlamento. Por ejemplo: el partido Hun obtuvo ocho escaños, a diferencia del único representante que tuvo en las anteriores elecciones de 2020.
El debilitamiento de las posiciones del Partido Popular también se debió a la gran cantidad de casos de corrupción, que incluyen escándalos como la exportación de carbón en 2022, el fondo para educación de 2023 y la compra de autobuses en 2024. Como partido gobernante, el Partido Popular tiene la responsabilidad de estas faltas graves que dañaron su reputación.
Los próximos cuatro años pondrán a prueba la capacidad de Mongolia de enfrentar la situación y sacar provecho de las oportunidades que ofrece mayor diversidad y representación política. Además, ayudarán a saber si el país ha encontrado un sistema electoral óptimo, algo bueno para todo el país y no solo para un partido.