«¡Buda está con nosotros!»: La guerra en Ucrania ha cambiado el budismo ruso

Templo budista en Rusia. Imagen de Vello Väärtnõu vía Wikimedia Commons (CC BY-SA 3.0).

Este artículo de Alexey Voloshinov fue escrito para el medio ruso en línea 7 x 7. Globlal Voices lo tradujo, lo editó y lo está republicando con permiso.

Una considerable parte de budistas rusos que viven en las regiones de Buriatia, Tuvá y Kalmukia, también se vieron afectados por la guerra rusa en Ucrania. La intensa movilización y el miedo a la guerra han causado una grieta en la comunidad budista. Muchos están haciendo declaraciones contra la guerra y emigrando. Otros están yendo al frente a pesar de los valores budistas.

La región más pacifista en guerra

En 2022, las autoridades de Buriatia y Kalmukia, dos de las tres regiones de Rusia con más budistas, llevaron a cabo con especial dureza un reclutamiento militar de emergencia. Según activistas buriatos, en tres días desde el 21 de septiembre de 2022, unos 7000 hombres fueron llevados a las oficinas de alistamiento militar en Buriatia, con el plan de movilización del Ministerio de Defensa establecido en 300 000 personas para todo el país.

Kalmukia se convirtió en una de las pocas regiones de Rusia donde se excedió el cupo de movilización. Según varios informes, en lugar del 1% requerido, lograron convocar entre el 2-3% de reservistas.

Al mismo tiempo, según un análisis conjunto de Mediazona y la BBC, aproximadamente 1500 habitantes de Buriatia, con una población regional de 972 000 murieron en la guerra en Ucrania. En Tuvá, con una población de 338 000, murieron aproximadamente 618 soldados.

El 22 de septiembre, un día después del comienzo del reclutamiento militar, testigos empezaron a publicar videos de largas colas en la frontera entre Rusia y Mongolia.

Los primeros en llegar fueron habitantes de asentamientos fronterizos en Buriatia y Tuva, regiones que limitan con Mongolia. Después, la capital de Mongolia, Ulán Bator, también se convirtió en popular destino para los calmucos. Además de la ubicación geográfica, es porque calmucos, buriatos y tuvanos, entre otros, forman parte de los pueblos mongoles que viven en Rusia. En Mongolia, se les considera «de los suyos» y se les acoge como en casa, explican los lugareños.

Es difícil evaluar la magnitud de la emigración budista desde Rusia en el contexto de la guerra. Según datos incompletos del Estado, estamos hablando de miles de personas. Según las autoridades mongolas, en los 10 días posteriores al anuncio de la movilización, 6200 rusos entraron al país. Al mismo tiempo, Rusia informó que en 2022 los rusos batieron un récord de cinco años de entradas a Mongolia y a varios países vecinos.

Lamas combatientes: Líderes espirituales budistas apoyan la guerra en Ucrania

En la zona de guerra ucraniana, el budismo no está representado solo por budistas movilizados en Buriatia, Tuvá, Kalmukia y otras regiones. Por ejemplo, hacia mediados de 2023, los medios estatales rusos comenzaron a informar activamente sobre el único ‘lama militar’ en Rusia que fue al frente para apoyar a los soldados. Se trata del lama Bair Batomunkuev de Buriatia, miembro del consejo público del Ministerio de Defensa ruso.

El Ministerio de Defensa describe así el trabajo de Batomunkuev: «Ayuda al personal militar a fortalecer su fe, responde preguntas espirituales complejas y los impulsa a cumplir con las tareas necesarias para defender su patria».

A fines de 2023, los medios escribieron sobre la apertura de dos templos de campaña en la «zona de operación militar especial» (así es cómo el Gobierno ruso permite que se haga referencia a la guerra en Ucrania): uno ortodoxo y otro budista. «Los buriatos no huyen del campo de batalla si todavía hay una yurta convertida en dugan (templo)», dijo el jefe de la Sangha Budista Tradicional de Rusia, Pandito Khambo lama Damba Ayusheev.

Geshe Yonten (Sergey Krishov), presidente de la Administración Espiritual Central de los Budistas, felicitó a Vladímir Putin tras las elecciones de marzo de 2024. No apoyó directamente la guerra en Ucrania, pero se mostró complacido de que el Estado ruso, en los últimos años, haya «prestado especial atención a la preservación y el fortalecimiento de nuestros valores espirituales y morales tradicionales» (la ideología del Estado ruso de «preservar los valores tradicionales» tiene un papel importante en justificar la guerra en Ucrania y las represiones internas del Gobierno).

En una conversación con la publicación People of Baikal, un soldado de Buriatia recordó que sacerdotes ortodoxos y lamas budistas visitaron su campamento de campaña en la zona de guerra antes de las batallas.

I first went to the priests, and then to the lamas. Because at the front, you believe in everything, to be honest. Our lamas read prayers and told us to go to the enemy without anger and aggression. Well, like, you shoot at a Ukrainian soldier and don’t rejoice if you hit him, but feel compassion for him. Because that’s the Buddhist way.

Primero fui a los sacerdotes, y luego a los lamas. En el frente, para ser honestos, crees en todo. Nuestros lamas leyeron oraciones y nos dijeron que fuéramos hacia el enemigo sin ira ni agresividad. Es decir, disparas a un soldado ucraniano y no te alegras si lo alcanzas, sientes compasión por él. Esa es la forma budista.

En el mismo artículo, People of Baikal citó al lama Oleg Namzhilov de Buriatia:

Now we, ordinary Buddhists, find ourselves in a situation where we don’t decide anything. Our guys went to war out of necessity. Our task is to support them. If we turn away from them, say they are traitors and scum, then who are we after that?

Ahora nosotros, los budistas comunes, nos encontramos en una situación en la que no decidimos nada. Nuestros chicos fueron a la guerra por necesidad. Nuestra tarea es apoyarlos. Si les damos la espalda, decimos que son traidores y escoria, ¿qué somos nosotros?

Baldan Bazarov, exabad del Kuren Datsan en Buriatia, abandonó Rusia hacia mediados de 2022 para ir a Estados Unidos por sus creencias pacifistas. Cree que las opiniones de los lamas budistas influyen en las actitudes de los budistas rusos hacia la guerra. Quienes apoyan las acciones militares, en su opinión, se benefician de alguna manera. En una conversación con 7 x 7, Bazarov dijo:

Let’s say the Khambo Lama cannot ask for anything personally [Buddhist monks are forbidden to use money], but, for example, he asked Putin in the Kremlin to build a datsan in Moscow, which Buddhists themselves have not been able to do since the last millennium. Some lamas went to the war in Ukraine to support their compatriots. They [the lamas] are given money for the trip, so they can go there and back, stay in a hotel in Moscow — these are also ‘perks’ for them. They show that they care about the state, and after that, they can ask for something for their datsan.

Digamos que el lama khambo no puede pedir nada personalmente (a los monjes budistas se les prohíbe usar dinero), pero, por ejemplo, le pidió a Putin en el Kremlin que (construyera un datsan) en Moscú, algo que los propios budistas no han podido hacer desde el último milenio. Algunos lamas fueron a la guerra en Ucrania para apoyar a sus compatriotas. Los lamas reciben dinero para viajar, para alojarse en Moscú y poder regresar; esto también son «beneficios» para ellos. Muestran que se preocupan por el Estado y después de eso, pueden pedir algo en su datsan.

«Ayudar a los soldados genera karma negativo»: Budistas pacifistas

El propio Bazarov, dijo que no planeó ir a Estados Unidos, sino a Ucrania a «ayudar a los ucranianos a defender sus hogares, sus hijos y sus seres queridos». «Quería llegar a Ucrania para decirles la verdad a mis compatriotas, buriatos y mongoles, que creían en la propaganda de Putin», dijo el lama.

Cree que no hay contradicción entre el espíritu pacifista de la fe budista y el deseo de ir a uno de los países en guerra:

War is a manifestation of samsara [the world of suffering, passions, and lack of freedom, inseparably linked with the repetitive cycle of births and deaths in Buddhism]. Buddha explained that one must distance oneself from any manifestations of samsara. But at the same time, if someone comes to kill you in your home, you must protect your family, your loved ones… But in our case, our relatives went to kill, and we have to support this for the sake of some ephemeral state. This is wrong.

La guerra es la manifestación del samsara (el mundo del sufrimiento, las pasiones y la falta de libertad, inseparablemente ligado al ciclo repetitivo de nacimientos y muertes en el budismo). Buda explicó que uno debe distanciarse de cualquier manifestación del samsara. Pero al mismo tiempo, si alguien viene a tu casa a matarte, debes proteger a tu familia, tus seres queridos… En nuestro caso, nuestros parientes fueron a matar, y tenemos que apoyar esto por el bien de un Estado efímero. Esto está mal.

Sin embargo, Bazarov afirma que ayudar a las tropas rusas movilizadas no se ajusta a los principios budistas:

People went to Ukraine to kill people, and any help to them is negative karma

La gente fue a Ucrania a matar a otras personas y cualquier apoyo hacia ellos genera karma negativo.

Quizá, la declaración pacifista más destacada del budismo ruso la hizo el presidente de la Asociación de Budistas de Kalmukia, Telo Telku Rinpoche (Erdeni-Basan Ombadykov). En septiembre de 2022 dijo en una entrevista en el canal de YouTube «Alchemy of the Soul».

The Ukrainian side is, of course, right. They are defending their country, their land, their truth, their Constitution, their people,

La parte ucraniana tiene razón, por supuesto. Están defendiendo su país, su tierra, su verdad, su Constitución, su gente.

Unos meses después, las autoridades rusas añadieron a Rinpoche a la lista de agentes extranjeros (es ciudadano estadounidense), y renunció como lama supremo de Kalmukia. Ombadykov habló sobre su renuncia:

To the people of Kalmykia and all followers of Buddhism in these difficult times, I wish courage, resilience, and commitment to the ideals of compassion, love, and non-violence, on which our teaching of Buddha is based

A la gente de Kalmukia y a todos los seguiores del budismo en estos tiempos difíciles, les deseo coraje, resilencia, y compromiso con los ideales de compasión, amor y paz, en los que se basa nuestra enseñanza del Buda.

El Ministerio de Asuntos Internos de Kalmukia revocó el permiso de residencia del lama supremo en Rusia.

En febrero de 2023, Tenzin Choedak, abad del templo budista principal de la República, fue nombrado nuevo lama supremo de Kalmukia. No se sabe nada sobre sus opiniones políticas.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.