Este artículo se publicó en ProBox el 28 de agosto de 2024. El artículo es el segundo de una serie de investigación de tres partes Digital Terror (Terror digital), sobre represión en el contexto electoral venezolanos, en alianza con Digital Democracy Institute of the Américas y DFRLab. Esta es una versión editada que Global Voices reproduce en virtud de una acuerdo de asociación de medios.
Las recientes elecciones presidenciales en Venezuela generaron una ola de indignación y protestas en el país y el extranjero por el resultado oficial de las autoridades electorales, que declaró a Nicolás Maduro como ganador, con un discutido 51.20% de los votos. Ciudadanos venezolanos y la comunidad internacional se expresaron contra lo que muchos consideran un abierto fraude. En vez de reducir la intensidad de la crisis, el régimen intensificó la represión en línea y en las calles. Desde entonces, ONG han registrado uno de los mayores picos de represión contra las voces disidentes de los últimos 20 años.
La tecnología ha estado en el centro de todo, con denuncias de vigilancia, uso de drones, anulación de pasaportes, infraestructura de control de comunicaciones, bloqueo o cierre de medios digitales, o linchamiento digital contra quienes hablan contra el fraude electoral. En este contexto, el gobierno de Maduro incluso ha usado el aplicativo estatal VenApp para exponer a ciudadanos y detenerlos, en violación de los derechos humanos de los venezolanos que exigen transparencia en los resultados de las elecciones presidenciales.
Según su sitio web, VenApp es un aplicativo “desarrollado por el Gobierno Bolivariano de Venezuela para ofrecer a los usuarios la oportunidad de presentar reclamos y solicitudes directamente al presidente constitucional Nicolás Maduro”. Aunque inicialmente VenApp fue creado como plataforma para presentar denuncias sobre fallos en servicios públicos, cuando Maduro empezó a promocionar la idea de que hay una “amenaza terrorista” y una “guerra de comunicación” entre venezolanos que, presuntamente, buscan desestabilizar su posición y derrocarlo del poder, anunció una actualización al aplicativo para denunciar a miembros no chavistas de la comunidad.
Adrián González, director de la NGO Cazadores de Fake News, organización venezolana de verificación de datos, dijo a Probox:
No costó mucho crear un módulo adicional para que los usuarios de VenApp entregaran información que pueda ser de interés para los cuerpos de seguridad. La herramienta pasó de ser muy fácilmente, de ser una herramienta de asistencia ciudadana a una herramienta de denuncia en contra de disidentes.
Iria Puyosa, investigadora principal de la Iniciativa Democracia+Tecnología del Consejo Atlántico, afirma que usar VenApp para atacar a ciudadanos que se oponen al régimen autoritario de Maduro tiene un objetivo claro: desmantelar las redes de confianza en las comunidades populares.
El temor a que los vecinos sean delatores que envíen a la policía la ubicación de los disidentes para que puedan ser detenidos arbitrariamente es un mecanismo para reprimir las protestas y debilitar la organización política de las bases de las fuerzas democráticas.
Cómo el régimen de Maduro promueve a los informantes comunitarios
Antes de las elecciones presidenciales de 2024 en Venezuela, la represión digital ya había hecho que muchos venezolanos dependieran de medios sociales y aplicativos de mensajería para acceder a noticias independientes y denunciar abusos. Después del 28 de julio, cuando los ciudadanos y los medios duplicaron el uso de espacios en línea para documentar lo que la oposición y la comunidad internacional consideran como los resultados oficiales de las elecciones, el régimen de Maduro adaptó su planteamiento: redes sociales, antes usadas como herramientas de propaganda, empezaron a usarse como armas para denunciar las voces disidentes.
Maduro reactiva el sapeo, la delación, como mecanismo de control social. Los «patriotas cooperantes» con cuyos testomonios anónimos se ha encarcelado y torturado a tantos inocentes. https://t.co/fl8yagWSiY
— Ligia Bolivar (@ligiabolivar) July 31, 2024
Entre el 30 de julio y el 1 de agosto de 2024, el debate en línea sobre VenApp alcanzó niveles significativos de actividad en publicaciones en Facebook, Instagram y entre más de 5,500 grupos y canales públicos de WhatsApp y Telegram analizados por DDIA.
Esto fue tras el anuncio que hizo Maduro el 30 de julio, sobre la creación de una “nueva ventana” para que los usuarios “denuncien a quienes han atacado al pueblo para que podamos perseguirlos y hacer justicia». La nueva función permitió denunciar bajo la categoría de “guarimba fascista” (forma de protesta callejera con barricadas), y explica que estas denuncias abarcarían diversos temas, desde saqueo y desorden público a “desinformación” y daño a propiedad pública.
El estudio de ProBox identificó la mayor actividad en este tema entre el 30 de julio y el 1 de agosto, con 62.07% (450 menciones). Esto coincidió con un análisis de DFRLab que identificó un aumento en el contenido publicado en YouTube entre el 30 y 31 de julio, bajo términos como “VenApp”, “guarimba fascista”, “comandito terrorista”, con cerca de 600 videos publicados en apenas dos días.
Solo el 30 de julio, se publicaron más de 300 videos. Maduro anunció medidas para procesar a quienes protestaron contra el régimen, que incluyó usar VenApp para denunciar a los disidentes. Según DFRLab, con YouTube Data Tools, el régimen chavista rápidamente usó VenApp para criminalizar las protestas. Como explicó en un video publicado por Luigino Bracci Roa de Venezuela (figura relacionada con el Gobierno), que acumuló más de 25 600 visualizaciones al 15 de agosto, Maduro promovió el aplicación “para denunciar a grupos criminales y delincuentes con total privacidad y confidencialidad».
Otras publicaciones especificaron el nuevo uso del aplicativo, como un video del canal de Nahum Fernández, militante de PSUV, con instrucciones detalladas de cómo usar VenApp para perseguir “guarimbas fascistas”.
En las 48 horas siguientes al seguimiento de DDIA de medios sociales, y grupos y canales públicos en WhatsApp y Telegram tras el anuncio de la nueva función de VenApp, los investigadores identificaron, además de las explicaciones sobre cómo hacer que las denuncias en el aplicativo sean confidenciales, claras referencias a dos episodios de persecución y amenaza que marcaron la historia política del país: la Lista Tascón (2003–2004), una lista compuesta de personas que participaron en la huelga nacional contra el entonces presidente Hugo Chávez Frías; y la Operación Tun Tun (2017–2018), operación que persigue y detiene a figuras de oposición en su casa.
DDIA también identificó grupos a favor del Gobierno que empezaron a hacer listas de perfiles de personas que, presuntamente, no habían aceptado la anunciado reelección de Maduro, sobre todo en Telegram. Se identificó a dos grupos públicos que operaban así: “Against Guarimbas” (número desconocido de miembros) y “Caza Guarimbas VE” (más de 280 miembros).
Boicot y denuncia
Periodistas, activistas y medios pidieron denunciar a VenApp y que se alzaran alarmas en Google Play y Apple Store sobre el uso de este aplicativo para perseguir a los manifestantes. En Facebook, publicaciones anónimas ampliamente difundidas en Facebook mas de 1800 veces en apenas 24hours lograron que Apple y Google suspendiera la disponibilidad del aplicativo para descargas y actualizaciones.
El 31 de julio, cuando se supo que VenApp ya no estaba disponible en Google Play ni Apple Store, aumentó la narrativa oficial de “una potencia imperialista la censuró”. En ese momento, el archivo APK para VenApp se distribuía libre y descontroladamente, lo que permitió que el aplicativo funcionara en dispositivos Android. Este archivo se difundió en varios foros.
El 2 de agosto, desde el Palacio de Miraflores, Maduro sostuvo haber recibido más de 5000 quejas a través de VenApp por “amenazar a líderes callejeros, miembros del PSUV y simpatizantes del Gobierno».