Una joven manifestante en La Gran Protesta por la Verdad en la Plaza Lourdes en Bogotá, Colombia, el 17 de agosto de 2024. Foto por José Montilla, usada con su permiso.

“Libertad, libertad, libertad…” Las voces de miles resonaron en una sinfonía de esperanza en ciudades de todo el mundo el 17 de agosto, desde la Plaza Centennial en Edmonton, Canadá, hasta la Plaza Lourdes en Bogotá, Colombia, y en las calles de Venezuela. Era La Gran Protesta por la Verdad, una manifestación global contra la dictadura de Nicolás Maduro. Aunque separados por miles de kilómetros, los manifestantes compartían un mismo anhelo: libertad.

Los manifestantes esperan replicar estas protestas pacíficas el 28 de septiembre en la La Gran Protesta Mundial por la Libertad de Venezuela, donde se convoca a personas a presentarse en las calles del mundo entero.

Venezolanos y simpatizantes participando en La Gran Protesta por la Verdad en la Plaza Centennial en Edmonton, Canadá, el 17 de agosto de 2024. Foto por Avishta Seeras, usada con su permiso.

En Edmonton, el ambiente era increíble. Yo estaba allí, entre los manifestantes, sintiendo la energía que inundaba el espacio. “Había tanto amor, alegría, fortaleza y comunidad”, reflexioné más tarde. Todos, incluso aquellos que no se conocían, se unieron en una solidaridad palpable. Gisela, quien llegó a Canadá hace 18 años, tras ser despedida junto a 23,000 trabajadores petroleros durante la presidencia de Chávez, capturó este sentimiento: “Cada parte del mundo tiene un pequeño corazoncito de Venezuela. Hay una conexión inmediata con un venezolano, sin importar el tono de piel, la clase social, o la experiencia vivida”.

El mismo sentido de comunidad se replicó en Bogotá. José, un joven diseñador web que ha vivido allí por más de siete años, describió la protesta como lo más cercano que ha sentido a Venezuela en mucho tiempo: “Escuchar el himno, los acentos de mi país, fue increíble. Todos unidos por un mismo propósito: dar voz para que Venezuela se escuche en todo el mundo”.

Una manifestante mayor en La Gran Protesta por la Verdad en la Plaza Lourdes en Bogotá, Colombia, el 17 de agosto de 2024. Foto por José Montilla, usada con su permiso.

Desde Venezuela, Krisbel, una enfermera de 25 años, compartió un momento poderoso: “Ver a los abuelitos, incluso en sillas de ruedas, gritando ‘¡Y va a caer!‘ me llenó de una fe inmensa”. Estas imágenes reflejan la conexión profunda y la unidad que atraviesa fronteras y generaciones en la lucha por la libertad de Venezuela.

De Julio a Septiembre: Un Llamado Urgente a la Acción

Desde las protestas mundiales del 28 de julio y el 17 de agosto, la lucha no ha cesado. Por el contrario, la determinación de los venezolanos, tanto dentro como fuera del país, se ha intensificado. El próximo gran evento, La Gran Protesta Mundial por la Libertad de Venezuela, se llevará a cabo el 28 de septiembre, dos meses después de las fraudulentas elecciones que ratificaron a Maduro en el poder.

Estos meses han estado marcados por un aumento de la represión. María Corina Machado y Edmundo González Urrutía, líderes de la oposición, han sido perseguidos por el régimen. González, tras negarse a asistir a una audiencia en el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, huyó a España. “Yo tenía que estar en libertad para hacer lo que estoy haciendo: transmitir al mundo lo que está pasando en Venezuela”, declaró. Sin embargo, su exilio ha dejado a muchos venezolanos con sentimientos encontrados. Algunos lamentan que debilite la legitimidad de la oposición para reclamar la presidencia en enero, mientras otros se sienten aliviados de que, a sus 75 años, haya escapado de la cárcel y protegido a su familia.

A pesar de su exilio, la lucha continúa, liderada por María Corina en Venezuela. “Edmundo luchará desde afuera junto a nuestra diáspora, y yo lo seguiré haciendo aquí, junto a ustedes,” reafirmó a sus seguidores. Para muchos, María Corina sigue siendo el símbolo de resistencia en el país, y su presencia mantiene viva la esperanza de libertad. “Vamos con María Corina hasta el final,” enfatiza Julia, una costurera de 67 años que participó en las protestas en Venezuela.

Héctor, quien emigró a Canadá desde el norte de Venezuela en 2020, destaca cómo la diáspora juega un papel clave en amplificar el mensaje de resistencia: “Es un llamado a las organizaciones internacionales para que entiendan la magnitud de las violaciones sistemáticas de derechos humanos en Venezuela. Necesitamos replicar este mensaje sin descanso”. Para Héctor, esta lucha es profundamente personal, habiendo vivido la persecución y la falta de derechos en su país.

Voces de Resistencia: Luchando desde Tres Continentes

La protesta global del 17 de agosto fue más que una manifestación política; fue un acto de resistencia cultural y una reafirmación de identidad. “El recurso más importante de Venezuela es su gente”, comentó Gisela en Edmonton. “Estoy dispuesta a regresar y ayudar en lo que sea necesario para levantar a mi país”.

Luis, un otro manifestante en Bogotá, un ingeniero de sistemas de 32 años que salió de Venezuela hace siete años, comparte la esperanza de regresar a su país. “Quiero volver y ayudar a recuperar Venezuela, especialmente en la economía y la educación”, dijo. Aunque no pudo votar, Luis sueña con un futuro mejor para su país y está listo para contribuir en su reconstrucción.

La Gran Protesta por la Verdad en las calles de Venezuela, el 17 de agosto de 2024. Foto por Krisbel, usada con su permiso.

En Venezuela, la represión no ha silenciado a los manifestantes. Julia recordó cómo la tristeza tras los resultados electorales fraudulentos se transformó en esperanza durante la protesta del 17 de agosto: “La gente estaba contentísima, gritando, cantando y sonando cacerolas en apoyo a María Corina”. Para Julia, la clave es la protesta pacífica: “Como dice María Corina, salir a la calle sin violencia es cómo vamos a cambiar el país”.

“Debemos mantener la presión, tanto dentro como fuera del país. La unidad de todos los venezolanos es clave para lograr una verdadera transformación”, Krisbel, otra manifestante, afirmó.

Derechos Humanos y Comunidad: La Batalla por la Libertad

Un joven manifestante en La Gran Protesta por la Verdad en la Plaza Lourdes en Bogotá, Colombia, el 17 de agosto de 2024. Foto por José Montilla, usada con su permiso.

Reflexioné sobre la importancia de los derechos humanos en este momento crítico en la historia de Venezuela, pues todo el mundo debería tener el derecho a votar, a expresarse libremente y a protestar pacíficamente sin miedo a represalias.

En Venezuela, estos derechos están cada vez más amenazados. Como lo describió Héctor: “El gobierno reprime sistemáticamente cualquier opinión política contraria”. A pesar de la distancia, la diáspora sigue siendo una voz poderosa que amplifica el mensaje de aquellos que, dentro de Venezuela, enfrentan persecuciones diarias.

La Gran Protesta por la Verdad en la Plaza Lourdes en Bogotá, Colombia, el 17 de agosto de 2024. Foto por José Montilla, usada con su permiso.

El grito de “libertad” que resonó el 17 de agosto fue solo el comienzo. Con la protesta del 28 de septiembre a la vista, las voces de resistencia, dentro y fuera de Venezuela, se alzan nuevamente. Cada grito, cada protesta, nos acerca más a un futuro donde Venezuela sea verdaderamente libre.