
Pakistán mantuvo el primer puesto en la edicicón 2024 del Índice China, que mide la influencia de la República Popular China en todo el mundo. Captura de pantalla del sitio web China Index. Uso legítimo.
El Corredor Económico China-Pakistán, proyecto de desarrollo de infraestructura y energía de 62 000 millones de dólares iniciado en 2015, se ha convertido en fuente de conflicto y tensión, sobre todo en la provincia de Baluchistán, en el sur de Pakistán. A pesar de sus ambiciosos objetivos económicos, el proyecto enfrenta persistentes problemas de seguridad y ha generado resentimiento en algunas comunidades locales, lo que ha terminado en violencia.
Los ciudadanos chinos han sido atacados, como el ataque en el aeropuerto de Karachi en noviembre de 2024 y un tiroteo de una instalación que da empleo a trabajadores extranjeros. Estos incidentes pusieron de manifiesto reclamos enraizados por supuesta explotación de recursos en la región, desapariciones forzadas, descuido de la comunidad y exclusión de las decisiones.
El Índice China 2024 examinó la influencia de China en 98 países y ubicó a Pakistán como el país que está más expuesto a la influencia de China en todo el mundo.

Red ferroviaria Corredor Económico China-Pakistán. Imagen vía el Gobierno de Pakistán. Dominio público.
El Corredor considerado como progreso
El Gobierno pakistaní está trabajando en el Corredor Económico China-Pakistán – CPEC, proyecto de infraestructura chino de 3000 kilómetros, que incluye construir un puerto en aguas profundas en Gwadar y establecer un red ferroviaria que conecta la ciudad con Sinkiang, China. Como parte de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, que daría una vía más corta a través del puerto de Gwadar, que impulsará el comercio entre Europa, Medio Oriente y China. El proyecto también busca solucionar la escasez de electricidad y ayudar al país a pasar de una estructura económica agrícola a una industrial. Sin embargo, la persistente violencia ha detenido el progreso y preocupado por su viabilidad a largo plazo.
Balochistan, Pakistan's largest province, is making strides in employment. Initiatives like #BUITEMS Job Fair and NIC #Quetta are unlocking opportunities, while #CPEC projects such as Gwadar Port and Quetta-Zhob Road have created 10,000 local jobs. Growth in agriculture,… pic.twitter.com/2G2NCAUqcQ
— The Balochistan Diaries (TBD) (@BalochDiaries) January 11, 2025
Baluchistán, la mayor provincia de Pakistán, está avanzando en empleo. Iniciativas como Trabajo Justo de la Universidad de Tecnología de la Información, Ingeniería y Ciencias de la Gestión de Baluchistán y Instituto de tecnología de Quetta están abriendo oportunidades, mientras los proyectos del Corredor, como el puerto de Gwadar y la ruta Quetta-Zhob han creado 10 000 empleos locales. El crecimiento en agricultura, energía renovable, salud, tecnologías e información. y turismo está transformando el futuro económico de la región.
Complicaciones en seguridad y resistencia violenta
Pakistán se ha vuelto particularmente peligroso para los ciudadanos chinos, 14 incidentes costaron la vida a 20 personas en el último año. El Ejército de Liberación de Baluchistán – ELB, gran grupo militante etnonacionalista en la provincia, ha sido un atacante frecuente. Por mucho tiempo, el ELB ha defendido la autonomía de Baluchistán, con la esperanza de resolver problemas de marginación política, explotación económica y disputas por control de recursos. Estas acciones rebeldes se han intensificado como parte de una batalla más grande contra lo que se percibe como una tiranía del Gobierno pakistaní y las desapariciones forzadas. La Comisión de Investigación y Desapariciones Forzadas del Gobierno informa de 2752 casos activos en la provincia a enero de 2024, mientras el Gobierno de Pakistán sostiene que solo unas 50 personas están desparecidas.
Los ataques contra trabajadores chinos están conectados con la hostilidad del ELB con la participación de China en los proyectos de Baluchistán, sobre todo el Corredor Económico China-Pakistán, que los lugareños creen que aumenta su marginación política y económica.
Pese a las promesas de desarrollo de infraestructura, informes de The Express Tribune y The Diplomat indican que el Corredor no ha beneficiado la dinámica socioeconómica. Un informe del Banco Mundial de octubre de 2024 indica que, mientras el Corredor busca mejorar la infraestructura en Baluchistán, básicamente ha acelerado la explotación de recursos y dado poco beneficio a los habitantes de la zona.
La activista Ambreen Baloch publicó en X (antes Twitter):
The China-Pakistan Economic Corridor (#CPEC) is often viewed as a pathway to development, yet it primarily serves the interests of #China‘s elite. In #Balochistan, locals face marginalization despite abundant mineral wealth, as benefits bypass them. pic.twitter.com/dlrAj0bjkL
— Ambreen Baloch (@baloch_ambreen) January 14, 2025
El Corredor Económico China-Pakistán suele considerarse una vía hacia el desarrollo, pero sirve principalmente a los intereses de la élite de China. En Baluchistán, los lugareños enfrentan marginación pese a la abundante riqueza mineral, ya que no sacan beneficio alguno.
Este malestar, avivado por una combinación de reclamos locales y mayores preocupaciones nacionales e internacionales, ha causado inestabilidad en la región, que ha afectado la inversión extranjera.
Según el informe de la Comisión de Derechos Humanos de Baluchistán 2024, las corporaciones china priorizan la explotación de recursos, el daño ambiental y el dinero sobre la vida de las personas, mientras las autoridades pakistaníes siguen promocionando intereses chinos.

Depósitos minerales en rocas en el árido Baluchistán. Imagen de Rinam Fatima vía Wikimedia Commons (CC BY-SA 4.0).
Pakistán se acerca a China con la ayuda de otras iniciativas del Corredor, y a otros países del sur de Asia, como India, les preocupa y recelan la creciente influencia de China en la región. El investigador Zeus Hans Mendez señaló que las animosidades regionales también permiten actividades militantes en Baluchistán.
En Baluchistán, muchos conmemoran el aniversario de tumbas masivas encontradas en el distrito de Khuzdar el 25 de enero de 2014, y la conmemoración de este año se vio empañada por bloqueos de internet y otras formas de represión del Gobierno.
El periodista Basam Baloch publicó en X sobre el bloqueo:
A peaceful rally is going to be held in #Dalbandin just few to unite, raise awareness among the Baloch, where relatives of the forcibly disappeared Families are also present, but even then the guilty #Pakistan has shut down internet service #BalochGenocideRemembranceDay pic.twitter.com/blQKQevmyc
— بشام بلوچ (@Basham1Baloch) January 25, 2025
Habrá una manifestación pacífica en Dalbandin para unir a unos pocos y dar a conocer a los baluchíes, en la que estarán presentes parientes de los desaparecidos, pero incluso el culpable Pakistán ha bloqueado el servicio de internet.
Preocupación de China por sus trabajadores
Con frecuencia, las autoridades chinas han criticado la seguridad de su personal y de proyectos en Pakistán. Después del ataque del aeropuerto de Karachi en noviembre de 2024, el ministro de Exteriores chino expresó su preocupación por la seguridad de Pakistán, que intensifica las tensiones diplomáticas pues China pide más medidas de seguridad. Aunque Pakistán ha mejorado la seguridad en torno a puntos significativos del Corredor, estas medidas no bastaron para evitar la violencia, lo que muestra la deslumbrante debilidad en el sistema de seguridad de Pakistán. Por los problemas internos de socioseguridad de Pakistán y la situación local, hasta con la larga cooperación con China, es difícil para el país garantizar la subsistencia y las inversiones de su pueblo y de los extranjeros. Esta situación desmoraliza a los inversionistas internacionales y, a su vez, plantea dudas sobre la capacidad de Pakistán para mantener la estabilidad interna en un ambiente político tan complejo.
El periodista Asad Ali Toor comentó en X:
Wang Shengjie, #China’s political secretary to Pakistan, voiced unusually candid criticism of #Pakistan,
“If the security is not improved, who would come and work in this environment? There is hatred against the Chinese in Gwadar and #Balochistan,” he said https://t.co/BibFAIV2Ao— Asad Ali Toor (@AsadAToor) January 26, 2025
¿Qué falló en el Dubái de Pakistán? Dentro de la iniciativa china que está provocando atentados terroristas
La pequeña ciudad portuaria de Gwadar tiene un nuevo y enorme aeropuerto financiado por China, pero las sospechas locales sobre las verdaderas intenciones de Pekín amenazan con echar por tierra el proyecto.
—————-
Wang Shengjie, secretario político de China en Pakistán, expresó críticas inusualmente sinceras sobre Pakistán,
“Si no se mejora la seguridad, ¿quién vendrá a trabajar en este entorno? Hay odio contra los chinos en Gwadar y Baluchistán”, afirmó.
El futuro del Corredor
En general, los habitantes de la región de Baluchistán llevan mucho tiempo desencantados políticamente y privados económicamente. Lamentablemente, para la mayoría, la ejecución de los proyectos del Corredor solo ha ampliado su sensación de marginación. Según un informe de 2024 de Human Rights Watc, los habitantes de Baluchistán son escépticos respecto al Corredor y no creen que estén recibiendo resultados económicos positivos del proyecto.
Los académicos Hong Zhang y Ammar A. Malik sugirieron en un artículo publicado en el Georgetown Journal of International Affairs en diciembre de 2024 que Pakistán y China deberían adoptar un planteamiento más abierto para hacer avanzar el Corredor. Reconocer las deficiencias pasadas en la seguridad de Pakistán puede ayudar a reconstruir la confianza y fomentar el diálogo. También opinaron que ampliar los mecanismos de coordinación para incluir las aportaciones de las partes interesadas y los expertos locales es esencial para fomentar la apropiación local.