
Activistas en Madrid protestan contra las violaciones de los derechos LGBTQ+ en Rusia. Imagen de gaelx por Wikimedia Commons (CC BY-SA 2.0)..
Este artículo se publicó originalmente en la revista en línea Baikal People. Global Voices reproduce una versión traducida y editada, con autorización.
El Ministerio del Interior de Rusia planea empezar a rastrear personas que presuntamente pertenezcan al llamado «movimiento público LGBTQ+», que fue declarado «organización extremista» en Rusia. Las fuerzas del orden de todo el país están recopilando datos sobre personas LGBTQ+.
Al mismo tiempo, el número de delitos contra personas LGBTQ+ en Rusia está aumentando. De acuerdo con los cálculos realizados por el proyecto LGBTQ+ Case, en 2023, personas queer buscaron asistencia legal 3,4 veces con más frecuencia que en 2022. Más del 10% de los casos involucran a personas que han sufrido violencia. No hay estadísticas oficiales de cómo se han cometido tantos delitos contra las personas LGBTQ+. Los abogados dicen que estos delitos quedan mayormente sin denunciar.
Supervisiones de las organizaciones de derechos humanos Vyhod y Sfera muestran que más de la mitad de los encuestados que enfrentaron violencia en 2022 se negaron a ir a la Policía. Muchos temen ser expuestos y sufrir posibles restricciones de sus derechos, como ser expulsados de instituciones educacionales, perder el trabajo, persecución y violencia.
De acuerdo con el abogado de derechos LGBTQ+ Maks Olenichev:
In Russia, patriarchal ideas are strengthening — there is a growing perception in society that LGBTQ+ people violate “traditional values.” This, in the eyes of criminals (though not the law), justifies violence against them.
En Rusia, las ideas de patriarcado se están fortaleciendo, hay una creciente percepción en la sociedad de que las personas LGBTQ+ violan «los valores tradicionales». Esto, a los ojos de delincuentes (no la ley), justifica la violencia en su contra.
Otro abogado de los derechos LGBTQ+, que trabaja y vive en Rusia (y, por lo tanto, prefirió permanecer anónimo), señala que han aumentado los casos de extorsión y citas falsas. En su opinión, en los últimos dos años, los delincuentes han actuado a menudo por motivos políticos y no solo por lucro, como era más común antes.
En 2023, una encuesta realizada por Russian Field reveló que 62% de los encuestados creen que las personas LGBTQ+ no deberían tener los mismos derechos.
En los últimos tres años, las autoridades rusas han reforzado las leyes contra la comunidad LGBTQ+. En diciembre de 2022, aprobaron una «ley para prohibir totalmente la propaganda LGBTQ+»; en julio de 2023, prohibieron las transiciones de género; en octubre de 2023, declararon al llamado movimiento LGBTQ+ una «organización extremista».
La decisión de la Suprema Corte de clasificar al movimiento LGBTQ+ como una «organización extremista» y prohibir sus actividades reforzó aún más la percepción de los miembros de la comunidad como infractores de la ley.
La activista queer Dasha fue víctima de extorsión hacia mediados de 2024. Recibió mensajes de parte de una cuenta de Telegram desconocida: «Te vi en el chat ‘Lesbian Lobby’, conozcámonos». Después de conversar por dos semanas, su interlocutor, que también mostró interés en la expareja de Dasha, le pidió que le enviara fotos: «Eres la más hermosa, ¿por qué eres tan tímida?».
Dasha se negó y recibió esta respuesta: «¿Tus padres saben lo que estás haciendo? ¿Que escribes toda clase de cosas prohibidas en un país en donde hay leyes sobre la orientación tradicional?».
El nuevo conocido luego sugirió que «se conocieran y llegaran a un acuerdo» para que esto «no llegara a ningún lugar». Dasha no respondió y borró la conversación. Poco después, comenzó a experimentar ataques de pánico. «Estaba realmente asustada», explicó.
I kept expecting them to show up at my home or workplace. I used to think that if I wasn’t hiding the fact that I’m a lesbian, no one could use it against me. But then this happened. Now I’m much more cautious.
Seguía esperando a que aparecieran en mi casa o en donde trabajo. Pensaba que si no escondía el hecho de que soy lesbiana, nadie lo usaría en mi contra. Ahora soy mucho más precavida.
Otros miembros de canales de Telegram relacionados con la comunidad LGBTQ+ han dado cuenta de experiencias similares. Estas conversaciones a menudo terminan en citas falsas, chantaje y extorsión.
Los chats de estos canales se crearon principalmente como lugares seguros en donde las personas queer pudieran interactuar. Los administradores de los canales moderan las discusiones, lo que crea la impresión de que el espacio es seguro. Esto hace que los usuarios bajen la guardia. Los estafadores se aprovechan de esta confianza al pretender ser participantes de la conversación.
Además de las fotos de perfil falsas y mensajes repetitivos, los contactos sospechosos a menudo siguen algunos patrones. Por ejemplo, Sonia y Fran recibieron mensajes de un desconocido que afirmaba haber asistido a una universidad específica: «Mi nombre es Masha, soy mercadóloga, me gradúe de MGIMO«. Estos patrones repetitivos sugieren que una sola persona o grupo está detrás de estos mensajes, y que funcionan con un objetivo en común.
Antes, los extorsionadores amenazaban con exponer a sus víctimas ante sus familias o colegas, pero ahora, las posibles consecuencias se han vuelto más severas.
La investigadora Maria Kozlovskaya, en un artículo sobre la situación de las personas queer en Rusia, se señala que las personas LGBTQ+ encuentran difícil pedir ayuda, por lo que son objetivos fáciles para los delincuentes. Con menos derechos, son fáciles de robar.
Como regla, los criminales revelan sus verdaderas intenciones durante el primer encuentro y fuerzan a sus víctimas a grabar videos con declaraciones incriminatorias (tales como falsas confesiones de pedofilia). En uno de los casos más grandes conocidos, los extorsionistas chantajearon de esta manera a más de un centenar de personas.
El abogado por los derechos LGBTQ+, Maks Olenichev, enfatizó: si un agente de la ley te amenaza con un proceso penal por ser una persona queer y demanda dinero por mantenerse en silencio, esa persona está cometiendo un delito. Puedes hacer capturas de pantalla de esta correspondencia y presentar una denuncia ante el Comité de Investigación a través de su sitio web para iniciar un proceso penal por extorsión según el artículo 163 del Código Criminal.
Hoy en día, las personas queer en Rusia pueden ser acusadas según el artículo 6.21 del Código de Infracciones Administrativas de la Federación Rusa («Propaganda de relaciones o preferencias no tradicionales, transiciones de género, rechazo a la maternidad») y según el artículo 282.2 del Código Penal de la Federación Rusa («Organización de actividades de una organización extremista»). A los defensores de los derechos humanos les resulta difícil definir una lista precisa de acciones que pueden considerarse propaganda o participación en una organización extremista (además, no existe nada como una organización LGBTQ+ oficial).
Uno de los casos más destacados ocurrió en noviembre de 2024, cuando el director de la agencia de viajes Men Travel, Andrey Kotov, fue arrestado y acusado de crear una comunidad extremista. El «movimiento LGBTQ+» no fue mencionado directamente, pero los medios especularon que la razón fue la organización de «viajes para hombres homosexuales». Kotov fue encontrado muerto antes del juicio en un centro de detención el 29 de diciembre. De acuerdo con los investigadores, se suicidó.
Los defensores de derechos humanos también resaltan la persecución hacia los padres de adolescentes LGBTQ+. En dos casos, las madres fueron acusadas de «fallar en cumplir las responsabilidades parentales» debido a publicaciones en las redes sociales y al padre de un adolescente transgénero se le privó por completo de derechos parentales.
Los estafadores proponen ir al teatro, envían enlaces de pishing para comprar los boletos, o incluso ofrecen oportunidades de inversión. Vlad, subscriptor del canal de Telegram ParniPlus, relata que un joven le envió un mensaje, le dijo que era parte del chat.
Los dos intercambiaron mensajes por más de una semana. De acuerdo con Vlad, el desconocido parecía saber exactamente lo que él quería oír, lo que provoca solidaridad, como para ganar confianza. Después de una semana, le sugirió invertir, lo llamó una «oportunidad única de hacer dinero».
«Esto fue algo nuevo», pensó Vlad. «Antes, las personas me ‘enviaban desnudos’ o ‘personas como tú deberían estar en un hospital psiquiátrico’, pero ahora es una inversión». Después de esta proposición, bloqueó a la persona.
En mayo y junio de 2022, un tribunal de Moscú reviso un caso relacionado con citas falsas y posterior chantaje. El abogado que lleva el caso recuerda lo que dijo el acusado en el tribunal:
I am the forest ranger. I don’t know why you are judging me. Putin personally allowed me to hunt these people.
Soy el guardabosques. No sé por qué me están juzgando. Putin en persona me permitió cazar a esas personas.
De acuerdo con los abogados, al denunciar un delito a la Policía, declarar la afiliación a la comunidad LGBTQ+ no es una violación de las leyes antiextremistas. Los derechos de personas queer deben respetarse al igual que los de todos los demás. Es crucial buscar ayuda de organizaciones aliadas y con su apoyo, recurrir a la Policía. Cuando los equipos de derechos humanos reciben denuncias, realizan investigaciones independientes: recolectan evidencia antes de presentarlas ante las autoridades. La Policía suele acoger estos casos, ya que la evidencia ya está recopilada, lo que significa que alguien puede ser arrestado, lo que aumenta las estadísticas.