Ejército juvenil de Putin en Crimea, 9 de mayo de 2022. Imagen del Ministerio Soviético de la República de Crimea vía Wikimedia Commons (CC BY 4.0).

Este artículo se publicó originalmente en ruso en Novaya Vkladka el 18 de marzo de 2025. Global Voices tradujo el artículo, lo editó y lo reproduce con autorización de Novaya Vkladka.

VKontakte, o VK, es una plataforma de medios sociales rusa, creada en 2006 por Pavel Durov. Em 2015, se vendió a estructuras afiliadas al Estado. Desde ese momento, y sobre todo después del inicio de la invasión a gran escala de Ucrania en 2022, VK ha sido muy censurada. Desde la primera mitad de 2022, las publicaciones con temas militar–patrióticos inundaron las páginas de medios sociales de instituciones públicas en VK, como páginas de escuelas, guarderías, centros sociales, hospitales, teatros, museos y bibliotecas. Los periodistas de Novaya Vkladka hablaron con trabajadores de organizaciones estatales en las regiones para averiguar quién prepara estas publicaciones de propaganda, cómo participan los trabajadores del sector público y cómo sus elecciones personales dan forma al entorno de información.

Los nombres de las personas en este texto se han cambiado a su pedido.

A mediados de 2022, a Natalia de Petrozavodsk le ofrecieron el puesto de especialista en relaciones públicas en una institución gubernamental en el sector de bienestar social. Tres años después, Natalia aún no sabía qué hacía: no trabajaba con ninguno de los grupos mencionados en su nombre departamental (como pensionistas o menores). La institución tenía una cámara y otro equipo de filmación profesional, hasta una pantalla de croma en la pared de una de las oficinas. Sin embargo, en ese momento, la página de la institución en VKontakte solo tenía unos 2000 seguidores.

Los primeros cinco meses, Natalia se sentaba en su oficina, sin saber aún qué debía hacer exactamente. La inutilidad de su trabajo la llevó a la depresión. Al final, no lo resistió más y renunció. Pero meses después, regresó porque necesitaba el dinero y le era difícil encontrar otro empleo por su mal estado psicológico. Eso fue cuando descubrió que la antes irrelevante página de medios sociales de la institución  había empezado a recibir “noticias de arriba”.

Natalia recuerda:

As far as I know, the news was generated by the Regional Management Center (RMC) and manually distributed through all subordinate institutions. My director sent them to me for publication, and she received them from the RMC. The news was generic. If you scroll through any state-run page, you’ll see the same format: videos about the war, “our guys,” and so on. Among ourselves, we called them “crap-news.”

Hasta donde sé, las noticias las generaba el Centro de Gestión Regional y las distribuía manualmente a través de todas las instituciones subordinadas. Mi directora me las enviaba para publicar, ella las recibía del Centro de Gestión. Las noticias eran genéricas. Si te desplazas por cualquier página estatal, verás el mismo formato: videos sobre la guerra, «nuestros muchachos», y más. Entre nosotros, las llamábamos “noticias de porquería”.

Gestionar páginas de medios sociales se volvió obligatorio para todos los entes gubernamentales, autoridades locales y organizaciones afiliadas en diciembre de 2022. Se hicieron las correspondientes enmiendas a la ley federal en julio de ese año. El Gobierno ruso designó a VKontakte y Odnoklassniki como redes sociales de prioridad social. Los grupos tenían que estar registrados en la plataforma de Gosuslugi (servicios estatales), después de lo cual sus páginas exhibían una bandera con la leyenda “organización estatal”.

Según sus administradores, estas páginas manejadas por el Gobierno deben ser un “convenientes sistemas de comunicación entre autoridades y ciudadanos”.

“No hay otro sistema de transparencia gubernamental en el mundo en el que cada agencia tiene su propia página de medios sociales. […] Se considera que la ley ha logrado su objetivo y no requiere reformas. Las páginas gestionadas por el Gobierno constituyen la mayor junta editorial del mundo. Tenemos 17 000 páginas públicas y, según los datos más recientes, apenas el 70% de las páginas se mantienen sistemática y consistentemente, lo que significa que hay al menos tres publicaciones por semana”, dijo Andrey Tsepelev, subdirector general de “Regiones de diálogo”, en diciembre de 2024.

Tsepelev citó datos de VTsIOM (Centro Ruso de Investigación de la Opinión Pública) que indican que uno de cada tres rusos sigue estas  páginas gubernamentales  y las llamó “arma en la guerra híbrida de la información que se contra nuestro país».

Desde el principio, la creación de contenido militar–patriótico para estas páginas lo gestionaban centros locales que se establecieron en cada república o región de la Federación Rusa en 2020 bajo órdenes de Vladimir Putin.

Poco después de que se aprobaron las reformas legales, apareció un  nuevo administrador en la página de medios sociales de una institución social: el secretario de prensa del Ministerio de Protección Social regional. Estos administradores “designados desde arriba” (como secretarios de prensa de agencias pertinentes) entraban a sus cuentas de Gosuslugi y distribuían las noticias a las comunidades en su sector.

«Al principio, los mensajes se enviaban para su publicación manual, pero en algún momento empezaron a publicarse automáticamente. De repente, todas mis redes sociales se inundaron de noticias de porquería», recuerda Natalia.

Lo mismo ocurrió en un teatro estatal de la región de Kirov. Antes de 2022, las páginas del teatro en las redes sociales se manejaban automáticamente, pero después se reforzó el control y también empezaron a recibir noticias de arriba abajo. A diferencia de las publicaciones propias del teatro, estas de carácter patriótico, según la empleada Evgenia, las ignoraba el público y eran las que menos «me gusta» recibían.

Inna, que lleva más de diez años gestionando varias páginas de centros juveniles en la región de Novosibirsk, recuerda que dos semanas después de que se modificó la ley a mediados de 2022, recibieron un correo electrónico con instrucciones para registrar su página en Gosuslugi, y todos los administradores tuvieron que vincular sus cuentas personales al portal gubernamental. Los que no lo hacían en el plazo de una semana eran destituidos como administradores.

Para ella, no era cuestión de no cumplir, ya que necesitaba publicar información sobre actividades y proyectos. «Todos tenemos una carga de trabajo demencial, y estas tareas son cosas que se hacen y se siguen adelante. Quienes no lo consideraban importante simplemente no pasaban por el proceso de registro».

There was this pressure element — mandatory posts were sent down. Our director didn't change anything; she just posted them as they came. But she is patriotic. I don’t remember exactly what those posts were because it was hard for me to deal with, and I just wanted to delete them all.

Había un elemento para presionar: se enviaban mensajes obligatorios. Nuestra directora no cambiaba nada; se limitaba a publicarlos tal como venían. Pero es una patriota. No recuerdo exactamente cuáles eran esos mensajes, porque me resultaba difícil lidiar con eso y solo quería borrarlos todos.

Dice que desde la municipalidad y la administración del distrito se enviaron mensajes con normas sobre «cómo trabajar con los jóvenes en un momento de tensión sociopolítica». También se les dio una lista de documentales de guerra obligatorios –«solo los más sangrientos posibles»– para mostrar a niños y adolescentes. Inna y sus colegas fingieron haberlos visto e incluso falsificaron un reportaje fotográfico, pero en realidad nunca mostraron las películas a los visitantes.

Ludmila, empleada de una guardería de Vologda, dijo que el Departamento de Educación regional los llamó y les pidió que añadieran una cuenta desconocida como administradora de su página de VKontakte.

Esta misma cuenta también administraba otras páginas de instituciones educativas. La cuenta se había creado en diciembre de 2020, poco después de que se estableciera el centro de gestión regional en Vólogda. Según Ludmila, este administrador ahora publica «contenido progubernamental» en nombre de su institución.

Incluso la formación de los empleados del sector público en gestión de redes sociales corrió a cargo de los centros de gestión regional, en línea y presencialmente. Al principio, el control no era demasiado estricto: «Una noticia de porquería a la semana». Pero a partir de agosto de 2022, cuando comenzó la publicación automatizada, el centro de gestión regional de Carelia exigió al menos tres publicaciones únicas a la semana sobre la propia institución para «diluir» el contenido patriótico-militar con el fin de mejorar la clasificación en los algoritmos de las redes sociales.

Inna, de Novosibirsk, admite que a veces da «asco abrir» su página pública por la abundancia de contenido militar.

Recuerda que cuando pidieron a su centro juvenil que publicara anuncios de contratos para el servicio militar en 2022, algunos padres entre los suscriptores reaccionaron negativamente a esta propaganda e incluso escribieron al respecto en los comentarios. A partir de entonces, se redujo el número de publicaciones de este tipo. Inna recuerda que una vez borró un largo comentario antibelicista «por si acaso», para que su multaran a su autor.

Olga, de Buriatia, cuenta que en la página pública de turismo regional en la que trabajaba no había ningún comentario sobre la guerra. Recuerda que cuando el director le pidió que se reuniera con los militares en el aeropuerto y escribiera un artículo al respecto, ella se negó a ir, y no hubo consecuencias para ella en el trabajo.