
Imagen de una calle en la ciudad de Goma. Con el M23, las calles quedan vacías después de las 19:00 horas. Foto de Victoire Katembo Mbuto, usada con autorización.
Este artículo de Victoire Katembo Mbuto se publicó originalmente en IciCongo y se reproduce en Global Voices en virtud de un acuerdo para compartir contenido.
Desde enero de 2025, el grupo rebelde M23 controla la ciudad de Goma, al este de República Democrática del Congo. El miedo y la incertidumbre por el futuro se amplían pues la violencia se ha vuelto cotidiana.
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El miércoles 23 de abril de 2025, una lluvia ligera cayó sobre la ciudad de Goma. En el barrio de Birere, distrito de Goma, todo está en calma. Las calles, antes llenas de peatones, mototaxis, chukudus (patinetas locales), comerciantes, shegués (niños de la calle), carteristas están ahora paralizados en un ambiente de cámara lenta. Todo está por los suelos.
Jean-Paul Sengemoja (seudónimo, por su seguridad), encargado de una tienda en Birere, se esfuerza por olvidar la entrada de las tropas del M23 a la ciudad de Goma, y recuerda:
Cette situation a déstabilisé toutes nos activités. Nous avons perdu des amis, des biens et nos commerces ont été pillés. C’est un pire cauchemar.
Esta situación desestabilizó todas nuestras actividades. Perdimos amigos, bienes y saquearon nuestras tiendas. Fue la peor pesadilla.
Con la entrada de diversos elementos del M23 a Goma, muchas tiendas sufrieron actos de pillaje, y cuenta:
Nous connaissons une chute de nos recettes. Avant cette guerre, nos recettes allaient de 2 000 à 5 000 dollars américains par jour. Aujourd’hui, nous réalisons difficilement entre 300 et 500 dollars. On ne travaille presque plus.
Tuvimos una caída en nuestros ingresos. Antes de esta guerra, nuestros ingresos estaban entre los 2000 y 5000 dólares por día. Ahora, difícilmente llegamos a recibir entre 300 y 500 dólares. Ya casi no trabajamos.
Los hoteles y bares funcionan muy poco, o no atienden. Una apariencia de normalidad reina durante el día. Pero después de las 19:00 horas, las calles quedan vacías. Al momento de la toma de la ciudad, los miembros del M23 garantizaron la circulación libre de personas las 24 horas del día. Una persona, apurada por llegar a casa, dijo:
C’est une peur que nous mêmes nous ne savons pas expliquer.
Es un miedo que nosotros mismos no sabemos explicar.
Extranjero en su propio país
Cada maña, Goma cuenta a sus muertos. Los cuerpos, que yacen las calles, son descubiertos al alba. No pasa una noche sin que se hable de habitaciones atacadas, personas muertas, robos de bienes de valor, desaparición de personas. Nadie está en capacidad de determinar las circunstancias de las muertes nocturnas ni de identificar a los autores con certeza. Los habitantes están privados de administración y de instituciones públicas, tribunales, Policía y servicios básicos, y viven en una psicosis permanente, entre delincuencia armada, violencia, represalias y presencia de hombres armados.
El paso de militares, de noche y de día, atemoriza a las habitantes, y sobre todo a los jóvenes. El caso de John Alimasi, de 18 años, es una muestra. No soporta la presencia de vehículos militares desde que escapó a un reclutamiento forzado:
Un certain jeudi, j’ai échappé à un enlèvement avec des jeunes de mon quartier. Quand je vois une jeep militaire, je me sens mal à l’aise. J’ai toujours peur et je me sens comme un étranger dans mon propre pays.
Un jueves, escapé de un reclutamiento forzado con jóvenes de mi barrio. Cuando veo un jeep militar, me siento incómodo. Siempre tengo miedo, me siento como un extranjero en mi propio país.
La desesperanza se instala cada vez más en el corazón de la población. Cada día parece más pesado y más largo que el anterior. Con el cierre de bancos y otras instituciones financieras, los negocios tienen dificultadas. El trabajador de una ONG local, desempleado por la guerra, se lamenta:
Nous allons mourir de faim alors que nous avons des fonds logés dans des banques et coopératives. Nous ne savons même plus accéder aux soins faute d’argent. C’est l’automédication qui s’installe dans nos ménages. Tout a changé. Le coût des biens est devenu exorbitant. Il est devenu difficile de s’en sortir avec l’instabilité du taux de change.
Vamos a morir de hambre, nuestros fondos están retenidos en bancos y cooperativas. Ya no podemos atender nuestras necesidades de salud por falta de dinero. En nuestra vida se ha instalado la automedicación. Todo ha cambiado. El precio de los artículos es exorbitante. Se ha vuelto difícil enfrentar la inestabilidad de los tipos de cambio.
IciCongo da cuenta de un recorrido entre Butembo, Kichanga y Goma, al que califica como el viaje a un calvario.
En los medios y los espacios públicos, la población está reticente a expresarse sobre la actualidad en la ciudad. La señora Safi, vendedora de productos manufacturados, indica:
Nous apprenons que des gens sont chaque fois fouettés. D’autres trouvent la mort suite à ces fouets. D’autres encore sont contraints de rejoindre l’armée du M23. Tout ça on nous les raconte mais nous n’avons pas assez de preuve. Aujourd’hui j’ai peur des messages sur les réseaux sociaux. On ne perd rien quand on garde le silence.
Nos hemos enterado de que han golpeado a algunas personas. Algunos han muerto por esos golpes. A otros los han obligado a unirse al M23. Todo eso nos lo contaron, pero no tenemos suficientes pruebas. Ahora tengo miedo de los mensajes en las redes sociales. No perdemos nada cuando nos quedamos callados.
El colapso de la economía
Por su parte, la economía se ha desacelerado. El sector de mototaxis y de chukudus (patinetas de madera) apenas logra ingresos. Jonas, conductor de chukudu, indica:
Aujourd’hui je gagne difficilement 2 000 ou 5 000 Francs Congolais (0,68 ou 1,70 dollar américain). Il est aussi devenu difficile de trouver des clients.
Ahora, difícilmente gano 2000 o 5000 francos congoleses (0,68 o 1,70 dólares). También se ha vuelto difícil encontrar clientes.
El periodismo también se ve afectado por el «fuego cruzado» entre M23 y las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo
En una cafetería situada en la ruta Goma-Sake, en el barrio de Lac Vert, al oeste de Goma, más allá del pobre rendimiento, Archange [seudónimo] se pregunta sobre la evolución de esta situación.
Combien de temps il nous reste pour nous tenir dans cette situation ?
¿Cuánto tiempo queda para que podamos sostener esta situación?
Un poco más lejos, en el barrio de Kyeshero, Mwasi, revendedora sentada ante sus productos, muestra una expresión de profunda fatiga e inquietud. No logra dormir desde la entrada del M23 a la ciudad de Goma. La persistente inseguridad afecta su salud:
Je n’arrive plus à dormir. Même au lit, je pense toujours aux probables attaques.
Ya no logro dormir. Incluso en la cama, pienso todo el tiempo en probables ataques.
Ahora en la ciudad de Goma, son muchos quienes pasan las noches en blanco.
Cada vez más problemas postraumáticos
En un comunicado de prensa publicado el 18 de febrero, el Comité internacional de la Cruz Roja informó que los establecimientos que financia recibieron diez veces la cantidad de heridos con relación a 2024, 1400 personas, sobre todo civiles. El comunicado destaca:
De nombreuses familles ont été séparées dans le chaos de la fuite et attendent avec angoisse des nouvelles de leurs proches, avec lesquels elles ont perdu contact. Dans un premier temps, il est essentiel de mettre en place des moyens de communication pour leur permettre d’informer leurs proches.
Numerosas familias se han separados en el caos de la huida y esperan con angustia noticias de sus seres queridos, con quienes han perdido contacto. En un primer momento, es esencial implementar medios de comunicación para informar sobre los seres queridos.
Según Dieudonné Bahati, psicólogo clínico, hay muchas personas con depresión en Goma desde el resurgimiento de esta guerra. Agrega que la guerra puede provocar un estado de estrés postraumático que acentúa la sensación de impotencia, y problemas de sueño y alimentación. Dieudonné Bahati recomienda:
Pour s’entraider, il est essentiel de vivre en harmonie. Lorsque quelque chose vous dérange, parlez-en à une personne de confiance.
Para ayudarse mutuamente, es esencial vivir en armonía. Cuando algo te molesta, habla con una persona de confianza.
Esta situación lleva a desarrollar pensamientos suicidas en algunas personas. Muchos han perdido casi todo, y quienes tenían un empleo, ya no lo tienen.
En ese misma perspectiva, Jean-Marie Vianney Basabose, neuropsiquiatra de «Salud Mental Tulizo Letu de Goma», explica:
Tout ce que la population de Goma a traversé a eu des répercussions sur le plan psychologique. Beaucoup de gens présentent des troubles post-traumatiques, et des cas de dépression sont également répertoriés, surtout chez les enfants.
Todo lo que la población de Goma a atravesado tuvo repercusiones en el plano psicológico. Mucha gente presenta problemas postraumáticos, y también se han dado casos de depresión, sobre todo en niños.
Actualmente, los esfuerzos diplomáticos parecen impotentes para llevar paz a Goma, lo que da poca esperanza a la población local y la deja solo en ese conflicto.