Joshua Wong. Foto: Tom Grundy /HKFP, usada con autorización.

El 6 de junio de 2025, el destacado activista hongkonés Joshua Wong fue arrestado y acusado de colusión, mientras cumple una sentencia de conspiración por subversión contra el Estado por participar en las elecciones primarias de las postergadas elecciones al Consejo Legislativo en 2021.

Wong ha pasado más de 1600 días en custodia desde el 23 de noviembre 23 de 2020, después de que fue detenido por organizar una asamblea no autorizada contra la violencia policial durante las protestas a favor de la democracia de 2019. En prisión, ha enfrentado más acusaciones y sentencias de cárcel por violar una ley contra las mascarillas durante una protesta de 2019, participar en una asamblea ilegal de aniversario de la masacre de la plaza Tiananmén en 2020, y una acusación de subversión por organizar elecciones primarias a favor de la democracia junto con 46 activistas. Estaba previsto que Wong quedara en libertad a comienzos de 2027.

Sin embargo, antes del sexto aniversario de las protestas a favor dela democracia de 2019, Wang fue arrestado en la prisión Stanley de Hong Kong, y trasladado a las cortes West Kowloon el 6 de junio de 2025.

Según la hoja de acusación, fue acusado de conspirar con el activista exiliado Nathan Law y “otros desconocidos” entre el 1 de julio y el 23 de noviembre de 2020, para solicitar a otros países, personas y organizaciones extranjeras que viven fuera del país que impusieran sanciones, bloqueos o emprendieran actividades hostiles contra Hong Kong o China. También fue acusado de conspirar para solicitar a potencias u organizaciones extranjeras que perturben la formulación e implementación de leyes y políticas en Hong Kong y China.

Wong podría llegar a recibir sentencia de cadena perpetua, y la siguiente audiencia está programada para el 8 de agosto de 2025.

Los delitos de colusión extranjera, además de subversión, terrorismo y secesión, fueron incorporados en la legislación de Hong Kong en la ley de seguridad nacional impuesta por Pekín, aprobada el 30 de junio de 2020.

Aunque la ley de seguridad nacional no es retroactiva, Wong fue una de las figuras más destacadas que instaron al Gobierno de Estados Unidos a imponer sanciones a funcionarios de Hong Kong que fueron responsables de la violenta represión de las protestas de 2019 a comienzos de 2020. El mismo día que la ley entró en vigencia, Wong, junto con Agnes Chow y Nathan Law, anunciaron su renuncia a Demosistō, el grupo política que fundaron. Poco después de su renuncia, Demosistō también anunció la suspensión de todas sus operaciones. Dos días después, el 2 de julio de 2020, Nathan Law anunció que había salido de Hong Kong.

Nathan Law ha seguido activo en hacer presión a Gobiernos extranjeros para hablar contra las violaciones de derechos humanos en Hong Kong. Lo acusaron de incitar la secesión y colusión extranjera, y está en la lista de las 19 personas más buscadas de la Policía de Hong Kong.

El arresto de Wong es considerado la señal más perturbadora del deterioro de las condiciones de los derechos humanos en Hong Kong, y el compromiso con el estado de derecho. La veterana investigadora de derechos humanos Sophie Richardson escribió en X:

It’s now disturbingly easy to see that #HongKong authorities will continue to make up laws and purported violations of those to keep #JoshuaWong and other pro-democracy voices in jail for as long as suits #China #XiJinping. https://t.co/9NUszbN1Om

— Sophie Richardson (@SophieDRich) June 6, 2025

El activista hongkonés Joshua Wong enfrenta nuevas acusaciones en virtud de la ley de seguridad nacional.

Una vez más, las autoridades de Hong Kong arrestaron al destacado activista Joshua Wong el viernes 6 de junio, y lo acusaron de conspiración para coludirse con un país extranjero en virtud de una ley de seguridad impuesta por Pekín.
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Ahora es perturbadoramente fácil ver que las autoridades de Hong Kong seguirán haciendo leyes y violaciones a esas leyes para mantener a Joshua Wong y otras voces a favor de la democracia en la cárcel tanto tiempo como le convenga a China.

Sarah Brooks, directora para China de Amnistía Internacional, cree que el proceso buscaba generar un efecto paralizador en la sociedad civil:

Hong Kong’s National Security Law is turning five years old at the end of the month, and these new charges against Joshua Wong show that its capacity to be used by the Hong Kong authorities to threaten human rights in the city is as potent and present as ever… This latest charge against him underscores the authorities’ fear of prominent dissidents and shows the lengths they will go to keep them behind bars for as long as possible — in so doing, continuing a chilling effect on civic activism in the city.

La ley de seguridad nacional de Hong Kong cumple cinco años a fines de mes (junio), y estas nuevas acusaciones contra Joshua Wong demuestran que su capacidad para usada por las autoridades de Hong Kong para amenazar los derechos humanos en la ciudad sigue siendo tan potente y presente como siempre… Esta última acusación en su contra subraya el miedo de las autoridades a los disidentes destacados y demuestra hasta qué punto están dispuestas a mantenerlos entre rejas el mayor tiempo posible, con lo que continúa el efecto amedrentador sobre el activismo cívico en la ciudad.

Según se informa, el director de la Oficina de Asuntos de Hong Kong y Macao, Xia Baolong, visitará Hong Kong para el quinto aniversario dela promulgación de la ley de seguridad nacional.