
El georgiano Mamuka Mamulashvili lucha en el frente del conflicto entre Rusia y Ucrania. Fotografía de Facebook; utilizada con autorización.
Por primera vez en la historia de Ucrania, se ha concedido un honor militar de alto rango a dos ciudadanos georgianos que sirven en el frente de batalla. Uno de ellos es Mamuka Mamulashvili, comandante de la Legión Nacional de Georgia, la mayor unidad militar extranjera que lucha con las fuerzas ucranianas en la invasión de Rusia a Ucrania. Se le otorgaron medallas y certificados por su extraordinaria valentía también a Levan Pipia, que cofundó la Legión Nacional de Georgia.
Las medallas de plata de primera categoría que el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky entrega son un reconocimiento de la contribución de la Legión a la defensa de Ucrania contra la agresión rusa. «Esto no es un premio personal, pertenece a toda la Legión y a todos los georgianos que apoyan a Ucrania», dijo Mamulashvili a Global Voices en una entrevista telefónica grabada. «La condecoración del presidente simboliza un nivel superior de reconocimiento por nuestro sacrificio y compromiso».
A la condecoración le siguió una votación unánime en el Parlamento de Ucrania, que indica el apoyo estatal y destaca la legitimidad de la Legión como una fuerza combatiente.
Atacados por los servicios especiales rusos
Tras este reconocimiento hay un peligroso y sombrío contexto. Mumulashvii reveló que las fuerzas de seguridad rusas organizaron una campaña en línea para desacreditar a la Legión Nacional de Georgia, y ofreció una recompensa de 100,000 dólares por su cabeza.
«Intentaron convertirnos en un símbolo que había que destruir, en línea y físicamente. Nos atacaron como un mensaje a quienes apoyan a Ucrania internacionalmente», explicó Mamulashvili. Reconoce que la cooperación con las Fuerzas Armadas de Ucrania logró desmantelar una red de asesinatos que operaba principalmente en Kiev.
La creciente fuerza en el frente
Ahora, la Legión Nacional de Georgia continúa expandiéndose, despliega unidades móviles de artillería y participa en tareas de sabotaje, recopila información y ofensivas en el frente, especialmente en las volátiles regiones de Járvik y Sumy.
«Nuestros guerreros son principalmente georgianos, la mayor unidad militar extranjera en Ucrania. Mientras los voluntarios extranjeros vienen y van, nuestros hombres luchan aquí a largo plazo», dijo Mamulashvili. La moral sigue elevada a pesar de los casi tres años de conflicto, mientras los guerreros refuerzan sus habilidades y dominan las tecnologías militares modernas.
A pesar de su rol vital, la Legión opera sin ayuda financiera directa, depende de autofinanciación. Algunos miembros firman contratos con las fuerzas armadas de Ucrania, pero muchos no tienen contratos. «Recibimos apoyo internacional principalmente para entrenamiento y tecnología», añadió Mamulashvili. «Nuestros oficiales asisten a cursos en el extranjero para seguir el ritmo de la guerra en constante evolución».
Ambigua postura del Gobierno de Georgia
En cuanto a la posición oficial de Georgia en la guerra, el comandante de la Legión fue franco: «Actualmente, el Gobierno de Georgia no representa la voluntad de los georgianos que apoyan sobremanera a Ucrania», dijo Mamulashvili. «En la Legión, somos la verdadera voz de la sociedad georgiana aquí».
A la pregunta de la posibilidad de un cambio político, fue pragmático: «Las políticas prorrusas en Georgia terminarán solo con la derrota de Rusia en Ucrania. El futuro de Georgia está atado a esta guerra».
Desde la invasión a gran escala de Ucrania, los vínculos una vez amistosos entre Georgia y Ucrania se han desgastado, y los líderes de Sueño Georgiano —incluido al actual primer ministro, Irakli Gharibashvili— critican rutinariamente al país.
Los funcionarios del partido gobernante han afirmado repetidamente que Kiev pudo haber evitado la guerra de Rusia en Ucrania. En febrero de 2025, cuando le preguntaron qué podría haber hecho Ucrania para evitar la guerra, Kakha Kaladze, importante miembro del partido Sueño Georgiano y alcalde de Tiflis, dijo que «los políticos están en la política para hacer todo lo que esté a su alcance para evitar las amenazas y actuar según los intereses de su país y sus ciudadanos».
Orígenes y evolución de la Legión Nacional de Georgia
Los voluntarios de Georgia fundaron la Legión en 2014, poco después del estallido de la agresión rusa sobre el este de Ucrania con la anexión de Crimea, como una manera de apoyar la soberanía ucraniana. Lo que inicialmente era un modesto grupo de guerreros apasionados se ha convertido en la mayor y mejor organizada unidad militar extranjera en Ucrania.
Su creación fue impulsada por experiencias de la agresión imperial rusa —Georgia sufrió una guerra con Rusia en 2008— y el compromiso de apoyar a Ucrania en su lucha por la integridad territorial.
Con los años, la Legión se ha involucrado en batallas importantes y operaciones en todo el este de Ucrania, y se ha ganado una reputación de profesionalidad, resiliencia y efectividad. También sirve como un poderoso símbolo de la solidaridad de Georgia y Ucrania, y su resistencia frente al expansionismo ruso.






