[Todos los enlaces llevan a contenidos en portugués, a menos que se señale lo contrario]
Aunque muchos habitantes de Rio de Janeiro, conocidos como cariocas, esperan con ansias los emocionantes juegos, colores vibrantes y estadios renovados de la Copa del Mundo 2014 y las Olimpíadas 2016 en la ciudad, otros brasileños menos afortunados siempre recordarán el evento con lamentos e indignación por haber perdido sus hogares debido a las construcciones para los eventos.

Lanzamiento de la campaña Basta de Remoções Forçadas! (ativismo.anisitiabrasil.org.br) frente a la Cámara Municipal de Río de Janeiro, en Cinelândia. Foto de AF Rodrigues, compartida por Amnistía Internacional Brasil.
Según Amnistía Internacional Brasil, 19,200 familias han sido desalojadas forzadamente desde 2009 en Río de Janeiro para abrir espacios a las demandas de infraestructura consideradas como necesarias para la Copa del Mundo y las Olimpíadas, como vías, estacionamientos y la renovación del puerto de Río.
Como respuesta a estos desahucios, Amnistía Internacional lanzó la campaña Basta de Remoções Forçadas! (¡Basta de Desalojos Forzados!). Renata Neder, representante de la rama de derechos humanos de Amnistía Internacional Brasil, aseguró:
Há evidências de situações de violação do direito à moradia e remoções forçadas na cidade do Rio de Janeiro em decorrência de grandes intervenções urbanas e preparação para os megaeventos esportivos. A campanha quer chamar a atenção das autoridades locais para violações que já aconteceram e evitar que elas se repitam
Hay evidencias de la violación del derecho de propiedad y desalojos forzados en la ciudad de Río de Janeiro por causa de las grandes intervenciones urbanas por los megaeventos deportivos. La campaña busca llamar la atención de las autoridades locales sobre tales violaciones y evitar que se repitan.

Más de 19,000 familias han sido desplazadas desde 2009 e Río de Janeiro, según el propio gobierno de la ciudad. Una audiencia pública sobre «Desalojos por Grandes Proyectos en Río de Janeiro» tuvo lugar el 27 de septiembre. Imagen compartida por Racismo Ambiental (CC BY-NC 2.5 br)
La campaña de Amnistía se enfoca sobre todo en las comunidades de Providência y Vila Autódromo en Río, directamente afectadas por la construcción del la ruta Transoeste del autobús expreso [en]. Esta vía rápida de tránsito conecta al puerto de Río en el norte de la ciudad al pudiente vecindario de Barra de Tijuca en el lado oeste, donde estará ubicada la mayoría de la infraestructura de los Juegos Olímpicos.
El reporte señala que a las familias desalojadas por la construcción del Transoeste no se les informó bien sobre los acontecimientos y recibieron avisos de desalojo inmediato, recibiendo reubicación en zonas en exceso alejadas o con poca compensación (si es que recibieron alguna).
La campaña llama a la firma de una petición dirigida al Alcalde de Rio de Janeiro, Eduardo Paes, para garantías legales adecuadas para las familias y el alto inmediato a los desalojos obligados.
La campaña también sumó fuerzas en la página Facebook de Acorda Brasil (Despierta Brasil):
E se fosse a sua casa?
Moradores do Morro da #Providência, na zona portuária do Rio de Janeiro, reclamam da falta de transparência e da imposição dos projetos sem prévia negociação com a comunidade diretamente afetada: “Eles só chegaram para mostrar: ‘Isso é o que nós temos. Esse é o projeto que vai ser inserido, queiram vocês ou não’. Não houve participação, [o projeto] já chegou pronto. A #comunidade não participou de nada.
¿Qué si esta fuera tu casa?
Los residentes de la comunidad de Providência en la zona portuaria de Río están protestando por la falta de transparencia y la imposición de proyectos sin negociación previa con la comunidad afectada: «Solo nos mostraron: ‘esto es lo que hay. Este es el proyecto que sucederán, les guste o no’. No hubo participación, el proyecto fue presentado ya completo. La comunidad no participó para nada».
Amnistía Internacional publicó testimonios anónimos de residentes del lugar. Lea uno de ellos más abajo:
De uma certa forma, eu perdi a minha casa por causa da Copa. Eu não consigo mais sentir aquela alegria com a Copa depois disso…” (Jorge Santos, ex-morador da Vila Recreio II, morava lá há 16 anos). Jorge foi o último morador a ser removido. Ele e mais 11 famílias só receberam a indenização no final de 2012, mais de um ano depois da remoção da comunidade.
De una forma, perdí mi casa por la Copa del Mundo. No puedo sentirme feliz por la Copa después de esto… (Jorge dos Santos, antiguo habitante de Vila Recreio II, vivió allí durante 16 años). Jorge fue el último residente expulsado. Él y otras familias solo recibieron compensación a finales de 2012, más de un año después de ser retirados.

Comunidad desalojada en la zona occidental de Río por los trabajos de construcción de las Olimpíadas 2016. Foto en Flickr de la UN Special Rapporteur on Adequate Housing (CC BY-NC-SA 2.0)
En Twitter, los desalojos forzados ganaron presencia con las etiquetas #direitoamoradia (derecho a una casa) y #remoções (desalojos).
Rádio Debate (@radiodebate), un show radial diario de la Universidad de Ceará, tuiteó:
Entre 150 e 170 mil pessoas estão ameaçadas de perder suas casas. Governo e Prefeitura não confirmam esse dado. #direitoamoradia
— Rádio Debate (@radiodebate) July 10, 2013
Una cuenta en Twitter que comparte actualizaciones sobre derechos humanos en Brasil (@direitoshumanos) tuiteó un video del Comité de la Gente de Río para la Copa y las Olimpíadas (Comitê Popular Rio Copa e Olimpíadas) con:
A Verdade sobre as #Remoções no Rio de Janeiro – «114 Vídeos, Uma Só História» http://t.co/wFJNeKhmnr – http://t.co/VXhFnbQMLo
— direitoshumanos (@direitoshumanos) September 30, 2013
Es importante recordar que el tema en debate no es la modernización de la infraestructura de Río -requerida para hospedar grandes eventos internacionales- sino la forma tan cuestionable como se está llevando a cabo, frecuentemente sin el consentimiento de residentes en las comunidades que sufren desahucios sin las garantías legales adecuadas, como compensación económica apropiada o consentimiento elemental.
El desafío aquí no es sobre estar preparados con la infraestructura propicia para estos acontecimientos, sino más bien ser vistos como un país con prácticas democráticas dudosas, que trata a sus ciudadanos de forma distinta según su posición económica y que no garantiza el derecho de propiedad a aquellos con la mayor necesidad de ser protegidos.
Conozca trabajos anteriores de Global Voices sobre desalojos relacionados con la FIFA:
28 mayo: Carlos Latuff: Caricaturas y la “ofensiva” de los desalojos del Mundial
24 mayo: Brasil: Indígenas se resisten al “desarrollo” impulsado por el estado
2 abril: Árboles centenarios enfrentan el hacha en Brasil
25 marzo: Brasil: Expulsan campamento indígena por obras del Mundial 2014
10 March: ¡Tiembla Fifa! Andrew Jennings se reune con el movimiento popular brasileño
5 marzo: Belo Horizonte: Carnaval y Copa, ¿habrá samba?
4 marzo: Rio de Janeiro: Francisca perdió todo por estar en el camino de la Transoeste
1 marzo: Río de Janeiro: Elisângela llegó a tiempo para ver caer su casa
1 comentario