La Reunión Mundial de Múltiples Partes Interesadas en el Futuro de la Gobernanza de Internet abrió sus puertas el miércoles 23 de abril en Sao Paulo, Brasil — a último minuto, el Senado Brasileño votó a favor de la aprobación de Marco Civil de Internet, promulgada por la presidenta Dilma Rousseff en las horas iniciales de la reunión del miércoles. Considerado como la primera «carta de derechos» de Internet del mundo, desarrollado a través de un enfoque legislativo multisectorial, el Marco Civil coloca a Brasil en un puesto de liderazgo sin precedente en el debate y la discusión global en torno a los derechos humanos y la tecnología.
Sin embargo, los activistas han comenzado a señalar que gran parte del lenguaje jurídico fue suavizado entre la primera y la segunda versión del proyecto de ley — y algunos tienen la sensación de que la protección a los derechos humanos ha sido minimizada en el texto actual.
Se dice que la versión del Marco Civil aprobada el martes por el Senado y posteriormente promulgada por la Presidenta Dilma Rousseff contiene disposiciones que obligan a la retención de datos por parte de los proveedores de contenidos que podrían resultar en violaciones a la privacidad. Del mismo modo, la protección a la neutralidad de la red no es tan sólida como lo fue en algún momento durante la larga espera para la aprobación de la ley. También se han planteado inquietudes respecto a la militarización del ciberespacio y la subrepresentación de algunos sectores de la sociedad que podrían haber sido excluidos de la reunión.
En respuesta a esta discusión, la sociedad civil ha redactado y abierto a la firma por parte del público, una carta demandando a los gobiernos adoptar una fuerte legislación para proteger las libertades ciudadanas y la neutralidad de la red, «la implementación de medidas eficaces para devolver la tecnología a los ciudadanos», permitir el acceso universal al contenido en línea y poner fin a la militarización del ciberespacio a través de leyes contra delitos cibernéticos excesivamente amplias.
La reunión de NETmundial pretende alcanzar cierto nivel de consenso global en torno a un modelo de múltiples partes interesadas para la gobernanza de internet, en un momento que los grupos de la sociedad civil consideran crítico para su causa. A raíz de las revelaciones de Snowden exponiendo los crímenes del gobierno y su doble moral respecto a la protección de las libertades en la red, muchos grupos de la sociedad civil sienten que es tiempo de desarrollar de forma colectiva un modelo basado en el consenso para la gobernanza de Internet y fijar un conjunto de fuertes principios en relación a los derechos humanos y el Internet.
Representantes del sector académico, sociedad civil y comunidad técnica, así como aproximadamente 90 gobiernos de todo el mundo han llegado a Sao Paulo a tomar parte en el evento. La sociedad civil tiene altas expectativas de la reunión, pero está claro que las cuestiones fundamentales no pueden y no deben ser resueltas en una reunión de dos días. La mayoría coincide en que la reunión debería ser solo el comienzo de una discusión mucho más amplia, y la fuente de creación de mecanismos que permitan representar y comprender las innumerables perspectivas de la conversación, incluyendo las de los mismos usuarios de Internet.