Los ciudadanos hacen un llamado por la paz
El 4 de enero, mientras los emisarios de la Comunidad Económica de los Estados del Oeste de África (ECOWAS, por sus siglas en inglés) salían de Costa de Marfil luego de las negociaciones con los dos supuestos presidentes, las Fuerzas de Seguridad y Defensa (FSD) de Gbagbo atacaron la sede central del partido de Ouattara en Abiyán. Un video particuarmente perturbador publicado en YouTube muestra a esas fuerzas manipulando el cadáver de un hombre.
Sin embargo, como normalmente lo hacen en cualquier otro año, la gente en Costa de Marfil quería celebrar el nuevo año a pesar de la crisis. Como lo explicó Suy Kahofi en un artículo en el sitio web marfileño avenue225, las mujeres se arreglaron para la víspera del Año Nuevo:
«Las peluquerías y otros espacios de belleza acogieron a todo el mundo hasta la medianoche e incluso a la una de la mañana».
Otro artículo explica que algunos decidieron entrar en el año 2011 rezando y meditando:
«De un lado, aquellos (cristianos o no) que dedican el fin de año a la oración, a la meditación».
Mientras la mayoría del mundo desea éxito, amor y felicidad en 2011, el principal deseo de los ciudadanos de Costa de Marfil fue regresar a la paz.
Luego de la tormenta de ideas organizada por el blogger Diaby Mohamed el 20 de diciembre de 2010, se lanzó una operación de paz bajo el nombre de «Operación Luz de vela y símbolo blanco de la paz«. Los mismos activistas de la paz también se las arreglaron para conseguir una declaración del famoso Didier Drogba y la selección nacional marfileña de fútbol, que hizo un llamado a respetar la paz.
Este llamado a la paz fue compartido en todo el país, y contrastó con la narración a menudo encontrada en los medios tradicionales sobre la situación en Costa de Marfil, un país del que a menudo se dice que está al borde de la guerra.
El acertijo colonial francés
La disputa post electoral entre dos candidatos a una votación presidencial ha sido transformada en un símbolo de la lucha del África francófona en contra de la interferencia de la comunidad internacional.
Particularmente, después de la retórica de los partidarios de Laurent Gbagbo, algunos consideran que lo que está pasando en Costa de Marfil es la prueba de otro intento más de «Franciáfrica», es decir, la famosa red de los grupos de presión entre Francia y África, para hacer y deshacer jefes de estado en el continente africano.
Esa posición planteó múltiples debates entre la comunidad africana francófona, haciendo del problema en Costa de Marfil una causa para toda la región africana de habla francesa.
En la página de Facebook de Laurent Gbagbo, que reúne a un poco más de 22,000 fans, un artículo titulado «Franciáfrica… el asunto sigue» y escrito luego de la transmisión en televisión nacional francesa de un documental llamado Franciáfrica, denuncia el intento del mundo occidental, y precisamente Francia, de imponer a Ouattara como presidente.
«Justo como prueba de lo contrario, Costa de Marfil no está bajo la tutela conjunta ONU-Francia. ¿Por qué esos dos depredadores, sobre todo Francia, quieren imponer a Ouattara en la presidencia de ese país en lugar del presidente electo Laurent GBAGBO?»
El artículo recibió más de 180 comentarios que muestran la radical oposición entre los africanos. Un usuario dice:
«Thomas Sankara (ex presidente asesinado de Burkina Faso) decía esto: «abajo los perezosos, abajo los corruptos… etcétera… abajo». Nosotros decimos: abajo el neocolonialismo, abajo el gobierno de Sarkozy, abajo los cómplices de la ONU, abajo los enemigos de África, abajo los dirigentes africanos «marionetas», abajo…».
Victoir Seyram Komla Agbogbo en el mismo artículo piensa lo contrario:
«No, yo no rechazo el discurso de Gbagbo. Salir del yugo del colonialismo no quiere decir confiscar el poder».
Más allá de las fronteras marfileñas, se organizan manifestaciones en todo África. Por ejemplo, en Camerún, tres partidos de oposición y miembros de la sociedad civil llamaron a una marcha a favor de Gbagbo en Douala y Yaoundé el 23 de diciembre. La manifestación fue dispersada por las fuerzas de la policía, y tres personas quedaron heridas.
Según Flora Boffy, una blogger francesa que vive en Camerún, los ciudadanos del país consideran a Costa de Marfil un ejemplo de las elecciones presidenciales que se vienen, que se llevarán a cabo en octubre o noviembre de 2011 (fecha a ser confirmada por el comité electoral). Los medios locales organizan una cobertura especial de las actividades marfileñas.
«Los acontecimientos en Costa de Marfil invitan a los ciudadanos camerunenses a conjeturas y traslados: Camerún – Costa de Marfil, ¿mismo combate? Ahora que Camerún se prepara para las presidenciales de 2011, la identificación es fuerte».
Los intelectuales africanos también participan en el debate, y el contraste entre sus posiciones es tan claro como lo es entre sus ciudadanos.
Los intelectuales a favor de Gbagbo emitieron un manifiesto en contra de la intervención militar en Costa de Marfil y la interferencia internacional. Entre los primeros firmantes: Calixthe Beyala, famoso escritor camerunés con ciudadanía francesa y Theophile Kouamouo, antiguo autor de Global Voices Online y periodista en Abiyán.
Venance Konan, escritor y blogger marfileño, publicó un folleto satírico «Dear Françafrique» (Querida Franciáfrica) donde hace un paralelo entre las acusaciones de brujería en África y el supuesto complot occidental.
«Acusar a Francia es acusar a una bruja cuando un borracho se mata al volante de su auto».
¡No al franco centroafricano!
De acuerdo con su oposición al neocolonialismo, Laurent Gbagbo y sus partidarios están llamando ahora a la creación de una moneda marfileña. Consistiría en dejar la zona del franco centroafricano (CFA) para asegurar la total independencia del país. El franco CFA se considera como un producto puro de Franciáfrica, y por consiguiente, esa sugerencia encuentra el apoyo de muchos africanos.
Nash Kpokou, economista del lado de Gbagbo, explica las ventajas de una moneda local en un artículo publicado en Le Temps Newspaper:
«No al franco CFA y a un gobierno elegido por Francia. Si a una moneda honesta y nacional, emitida sin deuda».
Según el periódico local Le Patriote, Gbagbo envió a sus asesores económicos a Venezuela con la finalidad de recibir asesoría para crear una moneda nacional, siguiendo el modelo del «bolívar fuerte» lanzado en 2008 por Hugo Chávez.