Las violaciones a la ley rusa de blogs están quedando impunes, mientras que a los representantes de la ley parece no importarle mucho imponer multas a aquellos que utilicen palabrotas, promuevan el consumo de drogas u ofendan la sensibilidad religiosa de otras personas en sus blogs.
Desde que hace siete meses la infame «ley de blogs» entró en vigor en Rusia, el organismo protector de telecomunicaciones Roskomnadzor ha registrado 67 violaciones en 53 de los blogs añadidos al nuevo registro de blogueros. TJournal informa que 40 de ellos promulgaban blasfemias en sus blogs y 17 «promovían el consumo de drogas». Otras violaciones incluían incitación al extremismo, propaganda de símbolos nazis y contenido ofensivo hacia algunas religiones.
Vadim Ampelonski, secretario de prensa de Roskomnadzor, explicó que el organismo protector solo puede registrar las violaciones, pero no puede imponer las sanciones desde que la ley exige que las autoridades competentes sean responsables de las repercusiones.
Само ведомство этого делать не может, так как «санкции» предусмотрены не законом о блогерах, а другими нормами права: например, ФСКН может заставить отвечать за пропаганду наркотиков, а Генпрокуратура — за экстремизм.
Nuestra institución no puede hacerlo por sí misma dado que las «sanciones» no se basan en la ley de blogs per se, sino en otras leyes. Por ejemplo, el Servicio Federal de Control de Drogas de Rusia puede hacer a alguien responsable de fomentar el consumo de drogas, y la Fiscalía General puede imponer [sanciones] por extremismo.
Un misterio interesante es, según Roskomnadzor, que la policía rusa no considere que internet sea un «espacio público», de modo que no vea la necesidad de perseguir a los usuarios por blasfemias y palabras malsonantes en los blogs. Ampelonski ha afirmado que de momento están debatiendo con los representantes de las fuerzas policiales si las normas administrativas pueden y deben aplicarse en el terreno online.
La ley de blogs entró en vigor el 1 de agosto de 2014, y asignó a Roskomnadzor la tarea de añadir en un registro a todos los blogueros rusos con más de 3000 visitas diarias. A los blogueros, que en esencia se equiparan a los principales medios de comunicación, se les prohibió compartir información sin verificar, incitar al extremismo e insultar. También se ha obligado a los blogueros populares a revelar información personal en sus páginas web. Las violaciones de la ley se castigarían con multas.
El 1 de agosto, cuando la ley entró en vigor, la Runet organizó una protesta simbólica, con muchos usuarios que publicaron de forma deliberada etiquetas, palabras e imágenes blasfemas en sus tuits para demostrar que la ley no tenía poder sobre ellos.
El 12 de febrero de 2015 un miembro del Parlamento de Ucrania propuso un anteproyecto de ley para regular la actividad bloguera que básicamente era una copia de la ley rusa. Después de una protesta pública de periodistas, abogados de la libertad de expresión e internet en general, el miembro del Parlamento retiró su propuesta alegando presión de grupo.