
Ley de prevención de delitos electrónicos (PECA), aprobada por la Asamblea Nacional de Pakistán en 2016. Captura de pantalla de la ley.
Entre el 11 y el 16 de septiembre, tres periodistas pakistaníes fueron acusados de sedición en virtud de la Ley de Prevención de Delitos Electrónicos (PECA) de Pakistán de 2016, ley que provocó críticas generalizadas por sus consecuencias en los derechos a la libertad de expresión y a la privacidad de los ciudadanos.
Los periodistas son Asad Toor, productor del programa televisivo «Sawal con Amber», que suele ser bastante crítico con el Gobierno y el Ejército, Bilal Faruqi, editor de noticias del periódico pakistaní The Express Tribune, y Absar Alam, expresidente de la Autoridad Reguladora de los Medios Electrónicos de Pakistán (PEMRA) y expresentador del canal de noticias AAJ.
Toor fue amonestado por una denuncia de alguien llamado Hafiz Ehtesham Ahmed, de la ciudad de Rawalpindi, que afirmó que el periodista «utilizó un lenguaje denigrante para referirse a instituciones gubernamentales de alto nivel, incluso el Ejército de Pakistán». Toor publicó una copia de la denuncia en las redes sociales:
Ok #Rawalpindi police charge me under PECA and registered this FIR on 12 September 2020 on the complaint of proxy Hafiz Ehtisham. Here is the copy of the FIR. This is a sad development for me being a journalist because I never wish to be a news myself.#Pakistan @ICJ_Asia @rcfp pic.twitter.com/fBVVwmTmNZ
— Asad Ali Toor (@AsadAToor) September 14, 2020
Bien, la Policía de Rawalpindi me acusa en virtud de PECA y registró esta denuncia el 12 de septiembre de 2020 en base a una denuncia del representante Hafiz Ehtisham. Aquí hay una copia de la denuncia. Esta es una novedad triste para mí como periodista, porque nunca espero ser yo mismo una noticia.
Toor dijo a Global Voices vía WhatsApp que la denuncia se formuló en virtud de los artículos 499 (difamación), 500 (castigo por difamación) y 505 (declaraciones que conducen a la afrenta pública) del Código Penal del país y, también, en virtud de los artículos 11 (discurso de odio), 20 (delitos contra la dignidad de una persona) y 37 (contenido ilícito en línea) de PECA.
El miércoles 16 de septiembre de 2020, el Tribunal Supremo de Islamabad aprobó una fianza temporal a Toor.
Faruqi fue detenido afuera de su casa la noche del 11 de septiembre, tras una denuncia por un ciudadano de Landhi, Karachi, que acusó a Faruqi de publicar «material altamente ofensivo» y «difamar» el Ejército de Pakistán en sus cuentas de Twitter y Facebook.
El periodista Mubashir Zaidi tuiteó:
FIR registered against @bilalfqi for posting anti-military and alleged sectarian social media posts pic.twitter.com/R3rob77uzc
— Mubashir Zaidi (@Xadeejournalist) September 11, 2020
Se registró una denuncia contra Faruqi por publicaciones en redes sociales, presuntamente sectaristas, contra los militares.
Fue liberado en la madrugada del 12 de septiembre con una «garantía personal» de su abogado Jibran Nasir.
El abogado Khursheed Alam presentó una denuncia parecida contra Alam en la ciudad de Jhelum. El abogado afirmó que Alam utilizó un lenguaje despectivo contra las instituciones y personalidades estatales en su cuenta de Twitter y pidió que se le culpara de sedición.
Faruqi y Alam enfrentan cargos en virtud del artículo 20 (ofensas contra la dignidad de una persona) de PECA de 2016.
Alam dijo que estas acusaciones y denuncias son como una medalla para él y que no lo presionarán.
ایسے غداری کے مُقدمے تو اعزاز ہیں ایک فسطائی نظام کے خلاف جدوجہد کرتے ہوئے۔
ہمیں تو مُشرف نا دبا سکا تو میری جان، جنرل باجوہ، کس گُمان میں ہے
رسیداں کڈو#bajwaleaks pic.twitter.com/R4TsTWgaI5— Absar Alam (@AbsarAlamHaider) September 11, 2020
Enfrentarse a un juicio por traición es un honor en la lucha contra un régimen fascista. Si Musharraf no pudo reprimirnos, mi amor, ¿qué piensa el general Bajwa? Da los recibos.
«Enséñanos los recibos» en este contexto se refiere a una investigación de la página web Fact Focus que expuso la corrupción dentro del Ejército pakistaní.
Según un informe de Freedom Network, entre mayo de 2019 y abril de 2020, ha habido más de 90 casos de ataques y violaciones contra periodistas en Pakistán.
Farieha Aziz, cofundador de Bolo Bhi, organización local de derechos digitales, tuiteó:
I can't even begin to express the absurdity. Defamation sections from the PPC and Sections 11 and 20 of PECA (both non-cognisable) fit pattern in FIRs. But what's new is the addition of Section 37 which is not even an offence under PECA! What creativity.https://t.co/a3HeQd65tx
— Farieha Aziz (@FariehaAziz) September 14, 2020
Bien, la Policía de Rawalpindi me acusa en virtud de PECA y registró esta denuncia el 12 de septiembre de 2020 en base a una denuncia del representante Hafiz Ehtisham. Aquí hay una copia de la denuncia. Esta es una novedad triste para mí como periodista, porque nunca espero ser yo mismo una noticia.
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No puedo ni empezar a expresar lo absurdo. Las secciones de difamación del PPC y los artículos 11 y 20 de la PECA (no detectables) encajan en el patrón de las denuncias. Pero lo que es nuevo es la adición del artículo 37 ¡que ni siquiera es un delito según PECA! ¡Qué creatividad!
Recientemente, se registraron denuncias similares contra Ihtesham Afghan, activista de derechos humanos pastún.
A day ago I saw this news item that an FIR has been registered against me for being “Anti state and for propagating against the army on social media”. Very similar to the way @bilalfqi @AbsarAlamHaider @AsadAToor have been targeted. Such tactics will not silence me. pic.twitter.com/2nbsgJZ3xl
— Ihtesham Afghan (@IhteshamAfghan) September 14, 2020
Ayer vi esta noticia de que se había formulado una denuncia en mi contra por ser «antiestatal y por expresarme contra el Ejército en las redes sociales». Muy similar a como han atacado a Bilal Farooqi, Absar Alam y Asad Ali Toor. Estas tácticas no me silenciarán.
La Comisión de Derechos Humanos de Pakistán hizo una declaración de solidaridad.
The alarming increase in such actions against journalists confirms that the government is bent on muzzling freedom of expression. HRCP demands that the rights of citizens be respected and that both the government and state adopt course correction.
El alarmante aumento de estas acciones contra periodistas confirma que el Gobierno está empeñado en amordazar la libertad de expresión. La Comisión de Derechos Humanos de Pakistán exige que se respeten los derechos de los ciudadanos y que tanto el Gobierno como el Estado adopten una corrección del rumbo.
El 14 de septiembre de 2020, M B Lokur, exjuez de la Corte Suprema de Justicia, declaró que «el Gobierno está utilizando la ley de sedición con una mano firme para suprimir la libertad de expresión en una reacción excesiva a la opinión pública».
Burlarse de los militares ahora es un crimen
El 17 de septiembre, la Asamblea Nacional de Pakistán aprobó una enmienda al Código Penal que criminaliza los intentos de ridiculizar al personal de las fuerzas armadas.
El proyecto de ley fue propuesto por el diputado Amjad Ali Khan del partido gobernante Movimiento por la Justicia de Pakistán (PTI). La ley dictamina que «burlarse deliberadamente, perjudicar o difamar las fuerzas armadas o sus miembros podría ser considerado un delito. Quienes lo hagan podrían enfrentarse a dos años de prisión y una multa de 500 000 rupias (poco más de 3000 dólares estadounidenses) o ambos».
Gul Bukhari, periodista y comentarista, tuiteó:
The new Bill criminalizing criticism of the army is a fascist attempt by the military to transform Pakistan into North Korea, where none can question its wrongdoing/ criminality; where impunity for it is written in law. I warn ALL parliamentarians against even THINKING about it.
— Gul Bukhari (@GulBukhari) September 16, 2020
El nuevo proyecto de ley que criminaliza las críticas al Ejército es un intento fascista del Ejército de transformar Pakistán en Corea del Norte, donde nadie puede cuestionar lo que hacen mal ni la criminalidad; donde la impunidad está contemplada en la ley. Advierto a TODOS los parlamentarios en contra incluso de PENSAR en eso.