Cuando un amigo nos envía un meme por WhatsApp y nos reímos, tendemos a pasar por alto que necesitamos diversos conocimientos políticos, culturales e históricos para captar el mensaje subyacente.
En el Observatorio Cívico de Medios y Redes desciframos el significado de los medios de diferentes contextos para dar sentido al mundo en el que vivimos y a las historias que nos contamos.
Los memes tal vez parezcan triviales, pero pueden ser vehículos de odio, propaganda o información falsa. Las redacciones, los ciudadanos y los Gobiernos suelen quedar confundidos sobre qué hacer con la información equivocada y falsa. Por ejemplo, la desinformación es abundante pero a veces inofensiva y puede reflejar simplemente una falta de conocimiento o de contexto. La desinformación, en cambio, es una información intencionadamente falsa creada para engañar.
En respuesta a estos problemas se ha desarrollado una industria de comprobación de hechos, y las empresas de redes sociales han ajustado sin cesar las normas de moderación de contenido y han abierto canales para denunciar el contenido que definen como engañosos o perjudiciales. Sin embargo, a diferencia de la verificación de datos, nuestro objetivo no es solo decir lo que es verdadero o falso, sino explicar el entorno más amplio en el que se tejen las historias.
El Observatorio explora los aspectos clave de cómo se mueve la información entre los seres humanos, explora los efectos de las emociones, las culturas y la narración de historias.
Las historias que nos contamos
Los investigadores del Observatorio recorren las redes de información para encontrar narrativas relevantes e importantes, que son suposiciones y creencias subyacentes que ayudan a dar forma a cómo la gente cuenta las cosas. Identificamos las narrativas analizando los elementos de los medios. Un elemento de los medios puede ser un tuit ingenioso, un meme dañino en Instagram, una pinta contra la guerra en una pared, un video de YouTube o una noticia de un servicio de noticias.
Dependiendo del proyecto, los investigadores pueden profundizar en temas transnacionales, como el autoritarismo digital. Por ejemplo, en 2022, las investigaciones revelaron que los periodistas de El Salvador han sido objeto de un programa espía Pegasus en sus teléfonos. Lo que es menos sabido es que el Gobierno de El Salvador ha estado culpando al empresario y filántropo George Soros de la vigilancia. Los usuarios anónimos de Twitter también han estado sembrando sospechas sobre Soros. Nuestros investigadores encontraron un patrón de intentos similares para culpar a Soros de las instalaciones del programa espía Pegasus en otros países, incluido Hungría.
Para Giovana Fleck, directora del Observatorio Cívico de Medios y Redes, las narrativas son la clave para entender nuestros ecosistemas mediáticos. «¿Cómo se forman las narrativas? ¿Quién las impulsa, quién está detrás, quién se beneficia, cómo se difunden, cómo impactan en la gente y cómo pueden ser perjudiciales?», se pregunta. «Todas esas preguntas guían a las organizaciones de la sociedad civil».
En el caso de Rusia, nuestros investigadores siguieron de cerca el aumento de narrativas durante meses antes de la invasión de Ucrania por parte de Putin. Ejemplos de estas narrativas son: «La crisis entre Rusia y Ucrania es una ficción creada por Occidente» o «Rusia siempre gana«. Estas narrativas evolucionaron después del 24 de febrero, y los ecosistemas mediáticos rusos están ahora plagados de argumentos alterados como: «El Ejército ruso está salvando a Ucrania y a los ucranianos del nazismo» o «Los crímenes de guerra de los que se acusa a Rusia son en realidad un montaje de Ucrania y Occidente».
La clave de nuestra investigación es entender por qué la gente crea y difunde un tuit, un meme o una historia concreta y qué impacto puede tener en la sociedad, especialmente cuando llega a miles de personas.
A diferencia de las herramientas automatizadas que analizan miles de tuits, el Observatorio se centra en el análisis cualitativo de nuestros ecosistemas de información. Nos basamos en el conocimiento local para explorar los matices del discurso, el simbolismo y el contexto.
Contextualizar la información
Para entender lo que la gente quiere decir cuando crea o difunde información, el contexto y el subtexto son fundamentales. Por eso los investigadores de los observatorios explican el contexto político, histórico y sociológico general que rodea a los medios que estudian. Hacen explícito lo implícito, desentrañando el significado implícito y el sesgo de los textos e imágenes.
Por ejemplo, uno de los investigadores del Observatorio de India buscó en páginas nacionalistas hindúes en Instagram y encontró un montaje perjudicial en el que se afirmaba que el Movimiento por las Vidas Negras en Estados Unidos es un engaño. A primera vista, podríamos preguntarnos por qué este video también propaga narrativas islamofóbicas como «el islam predica la violencia, los musulmanes son brutales, sin cultura» y «los hindúes están bajo amenaza«, ya que la publicación nunca menciona a los musulmanes. Pero en el contexto de India, el video adquiere otra capa de significado: equipara las narrativas racistas dirigidas a los negros en Estados Unidos con las narrativas islamofóbicas dirigidas a los musulmanes en India. Los comentarios de la publicación confirman que esta intención subtextual no pasó desapercibida para el público.
Enfoque sistemático al periodismo
«Acercarse a las narrativas requiere una determinada metodología», dice Giovana Fleck, y exige una lectura cuidadosa y crítica. Fleck cree que este enfoque de investigación tiene mucho que ofrecer al periodismo. «Es informar, es investigar y es responder a las preguntas que tenemos sobre el mundo, pero de forma sistemática», dice.
El trabajo de descubrir elementos de los medios, detectar sus mensajes subyacentes y vincularlos a las narrativas ayuda a los investigadores a evaluar el impacto cívico de un elemento de los medios.
«El aspecto más importante de las organizaciones de la sociedad civil es preguntarse cuáles son las posibles repercusiones de un artículo», explica Fleck. Algunos artículos ya han afectado al discurso social, mientras que otros pueden provocar el endurecimiento de una narrativa, o extenderse a la acción fuera de línea. Se pide a los investigadores que consideren efectos hipotéticos, basados en conocimientos empíricos y locales.
Por ejemplo, podría decirse que Tarkan, la mayor estrella del pop de Turquía, tiene gran influencia en la opinión pública. Nuestros investigadores escriben que «generalmente se le consideraba una figura apolítica, pero últimamente se está convirtiendo en un símbolo de la oposición», y se ha manifestado contra la construcción de infraestructuras en lugares históricos y culturales de Turquía. Como una de las voces más influyentes de Turquía, sus esfuerzos por proteger el patrimonio cultural pueden tener un impacto cívico positivo. Del mismo modo, un tuit que incluya un subtexto racista puede incitar a la violencia, y tendría un impacto cívico negativo.
-3 odioso, incitante. ilegal, desinformante o de otro tipo, o
material nocivo, con una gran audiencia, actividad coordinada y que pueda provocar daños
-2 material nocivo sin audiencia masiva o actividad coordinada; o material falso o desinformador con una audiencia masiva, material falso, desinformador, inexacto o material tendencioso que no contenga información/ conocimientos sustanciales
+1 material preciso de importancia general con poca influencia o importancia
+2 preciso, importancia material original que tiene valor y
preciso
+3 material preciso y original que expande la comprensión y merece una amplia audiencia
«No estamos prediciendo el futuro», dice Fleck, sobre el objetivo de las organizaciones de la sociedad civil, «pero queremos entender cómo una información errónea puede impactar en la gente».
Por ejemplo, en 2020, nuestros investigadores de Myanmar advirtieron sobre la posibilidad de que aumentara la polarización en el país por las intensas narrativas pro-militares y antidemocráticas que circulaban en línea [PDF]. Cuando nuestra investigación llegaba a su fin, a principios de 2021, Myanmar vivió un golpe de Estado y una violenta represión por parte de la Junta.
información de libre acceso
Los lectores y los colegas periodistas pueden acceder a nuestros conjuntos de datos públicos en Airtable, plataforma de bases de datos. Los conjuntos de datos se actualizan periódicamente con nuevos artículos de los medios y narrativas. Aquí están los enlaces a nuestra investigación por países de 2022 y a nuestra investigación de Unfreedom Monitor sobre autoritarismo digital. Este boletín y nuestros relatos también pretenden hacer digeribles nuestras conclusiones para un público general.
Abiertos a colaboraciones y charlas
El Observatorio Cívico de Medios y Redes ha iniciado varias colaboraciones con redacciones. Por ejemplo, el Miami Herald ha creado su propio observatorio para analizar las narrativas relacionadas con las próximas elecciones en Florida.
Nuestros investigadores intervienen regularmente en conferencias internacionales y universidades, como el Coloquio M100 Sanssouci en Potsdam, el Foro anual de CIPESA sobre la libertad en Internet en África en Lusaka, el Foro del Consejo de Europa en Lisboa, el Día Mundial de la Libertad de Prensa en Uruguay, Mozfest y RightsCon.
La investigación del Observatorio ha recibido el apoyo de DW Akademie, BBC Media Action, la Fundación MacArthur, NED y Meta, entre otros..
Leer más sobre el Observatorio Cívico de Medios y Redes
- Catherine Edwards entrevistó a Giovana Fleck para journalism.co.uk «¿Cómo se difunden las narrativas y qué significa esto para la forma de informar?”
- Para conocer con detalle la historia y la metodología de las organizaciones de la sociedad civil, consulta nuestro blog en la página comunitaria de Global Voices
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