Cada tercer fin de semana de enero se celebra en la parte antigua de San Juan, la capital de Puerto Rico, las legendarias Fiestas de la Calle San Sebastián, que para muchas personas marca definitivamente el final de la época navideña. Quienes no estén familiarizados con esta tradición puertorriqueña quizás piensen que se trata de un festival celebrado solamente en la Calle San Sebastián. La realidad es que con los años, las Fiestas han cobrado un auge impresionante, rebasando los límites de la calle y llegando a abarcar prácticamente la totalidad del Viejo San Juan, como se puede apreciar en el siguiente video:
Las Fiestas comenzaron originalmente como una celebración en honor a San Sebastián, nacido en Narbona, Francia, y quien durante el siglo III de la era común fue martirizado por no renunciar a la fe crisitiana. En la imaginería católica es común que se represente traspasado por varias flechas y atado a un árbol.
En la década de 1950 se comienza la tradición de celebrar las fiestas en honor a San Sebastián como una manera de recaudar fondos para la reparación de algunos edificios relacionados a la iglesia de San José en el Viejo San Juan. Luego de algunos años, se descontinúa la tradición hasta el 1970, cuando el arqueólogo, historiador y antropólogo Ricardo Alegría le sugiere a Rafaela Balladares, una residente de la Calle San Sebastián, que retome la tradición. Es así como nacen las Fiestas que se siguen celebrando hoy día, este año en su 44.ª edición.
Actualmente, las Fiestas han perdido bastante de su carácter religioso, convirtiéndose más en un festival de pueblo que atrae anualmente más de 300,000 personas.
A continuación, comparto algunas fotos que tomé durante mi visita a las Fiestas.