La decisión tomada por el Gobierno timorense de expulsar del país a todos los funcionarios judiciales internacionales, incluyendo a cinco jueces y un oficial de la Policía de Seguridad Pública (PSP) portuguesa ha creado inconformidad entre Portugal y Timor-Leste.
La resolucion afecta a cerca de 50 funcionarios, siendo la mayoría portugueses que ejercen funciones en la magistratura judicial de Timor-Leste. Esta decisión, tomada por el Estado timorense, va de la mano con una «profunda preocupación e inconformidad«. El Gobierno portugués deplora, por ser claramente desproporcionadas, las súbitas revocaciones de visas y autorizaciones de estadía (…)”, puede leerse en el comunicado enviado por el Ministerio de Negocios Extranjeros (MNE).
Entretanto, un comunicado publicado en Facebook por el Secretario General del Frente Revolucionario de Timor-Leste Independiente (FRETILIN), principal partido de oposición,»exhorta al Gobierno y al Primer Ministro a no rebasar los límites de su competencia de apoyo al sector de Justicia, y que debe evitar tomar decisiones que contribuyan simplemente a inhibir a los profesionales de la justicia y crear conflictos institucionales».