Ha causado indignación entre la ciudadanía, en México y al sur de sus fronteras, el caso de la joven Mara Fernanda Castilla, quien fue privada de la vida luego de abordar un taxi que contrató a través de la aplicación Cabify.
Entre la noche del 7 y la madrugada del 8 de septiembre de 2017, Mara Castilla se divertía con sus amigos en un club nocturno ubicado en San Andrés Cholula (en el estado de Puebla, al oriente del país). Después de la convivencia y para llegar a casa, Mara llamó a un taxi mediante la aplicación Cabify… pero nunca llegó a su domicilio.
Luego de varios días de que sus familiares reportaran desaparición, se confirmó que el cuerpo sin vida de Mara fue hallado en una carretera de Puebla, envuelto en una sábana y toallas con el logotipo de un motel de la zona. Poco antes del hallazgo, el conductor del taxi que Mara abordó ya había sido aprehendido por las autoridades locales.
El gobernador de Puebla informó en Twitter lo acontecido, con un par de publicaciones:
Con profundo dolor envío mi pésame a los familiares de #MaraCastilla. QDEP. El presunto responsable está detenido y pagará por este crimen. pic.twitter.com/88k05Z1ryl
— Tony Gali (@TonyGali) 15 de septiembre de 2017
Todo el peso de la ley a los responsables del crimen de #MaraCastilla. Revisaremos con rigor los estándares de seguridad de @Cabify_Mexico.
— Tony Gali (@TonyGali) 15 de septiembre de 2017
En días pasados reportamos cómo los servicios de Uber y Cabify en México han sido objeto de muchos señalamientos por parte de los usuarios, debido a la pobre calidad del servicio que brindan y los delitos que han sido cometidos en agravio de los pasajeros.
Tras el hallazgo del cadáver de Mara −con indicios de violencia sexual, según lo reportado por algunas fuentes− en México resurgieron las exigencias que han sido lanzadas en el pasado para atender la problemática de la violencia de género contra las mujeres. Durante la tormenta de tuits #SiMeMatan de mayo de este año –que pretendía que ironizar sobre la doble victimización que suele ocurrir en estos casos– la misma Mara compartió:
#SiMeMatan es porque me gustaba salir de noche y tomar mucha cerveza…
— MAPI (@MaraMiranda25) May 5, 2017
Esta misma etiqueta fue nuevamente utilizada en redes sociales para recordar a Mara y los cientos de casos de feminicidios en donde se culpa a la víctima:
#SiMeMatan se considerará «crimen de pasión» no feminicidio, dirán que andaba de provocadora, me fui con el novio, soy «puta», drogadicta,..
— Andrea Noel ϟ (@metabolizedjunk) 16 de septiembre de 2017
Detrás de cada mujer tuiteando #SiMeMatan hay una mujer indignada y buscando que #NiUnaMas vuelva a ser asesinada. pic.twitter.com/JIXQ9fWkaH
— Elena Ramírez ® (@SoyElenaRamirez) 18 de septiembre de 2017
#SiMeMatan seguro sera por haber ido a un concierto o al teatro de noche, seguro es mi culpa por disfrutar de mi vida.
— Sarita con S de sad. (@Sara_morcas) 18 de septiembre de 2017
En marzo de 2016, iniciamos una serie de trabajos sobre la violencia de género en México y la «solución» que el Gobierno encontró al problema: engrosar el aparato burocrático. En mayo de ese mismo año entrevistamos a una abogada experta en el tema, quien nos dijo que las mujeres del país se han ido acostumbrando «a vivir con ese miedo siempre latente».
Once entidades federativas en el territorio mexicano fueron escenario de marchas de protesta en contra de la violencia de género y la incapacidad de las autoridades para prevenirla y sancionarla.
Indignación que trasciende fronteras
El caso de Mara Castilla también fue informado en el Perú, donde por varios días los medios estuvieron al tanto de los avances hasta que se dio a conocer que se había hallado su cadáver.
El grupo Ni una menos Perú Tocan a una, tocan a todas: transmitió en su página de Facebook la marcha de protesta #NiUnaMás.
La noticia apareció en diarios de Colombia, Argentina, Brasil, Chile, y hasta Naciones Unidas a través de ONU Mujeres México se pronunció:
.@ONUMujeres y @ONUDHmexico condenamos el feminicidio de #MaraCastilla.
Más información: https://t.co/GMRMEHtGBU pic.twitter.com/4kr9ea3ZiS— ONU Mujeres México (@ONUMujeresMX) 18 de septiembre de 2017