En una reunión de aliados de OTAN en Bruselas en noviembre de 2017, el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, destacó la importancia de la libre expresión y la libertad de internet.
Un resumen publicado en el sitio web presidential oficial parafraseó los comentarios de Aliyev:
«Destacando los asuntos de desarrollo democrático, el presidente Ilham Aliyev dijo que internet libre, la libertad de expresión, la libertad de asamblea y otras libertades están garantizadas en Azerbaiyán».
Esta y otras afirmaciones similares han provocado escepticismo en muchos periodistas azerbaiyanos. Las palabras de Aliyev están a años luz de sus acciones de los últimos cinco años.
Entre 2013 y 2015, un aluvión de cambios regulatorios y amenazas legales arbitrarias pusieron a la alguna vez vibrante sociedad civil de periodistas, activistas y organizaciones juveniles de Azerbaiyán en la línea de fuego. Muchos fueron arrestados con acusaciones falsas. Otros salieron del país por temor de persecución.
Como resultado, mucha de la conversación restante sobre democracia, derechos y libertades pasó al mundo en línea. Pero cada año, se hace cada vez más claro que tampoco hay mucha tolerancia para la discrepancia en línea.
El último ejemplo llegó el 1 de diciembre de 2017, cuando los parlamentarios presentaron un nuevo grupo de enmiendas que responsabilizarán a personas, funcionarios y personas jurídicas –y estarán sujetos a multas– de difusión en línea de información «prohibida».
If an internet information resource is entered into the List of Information Resources that Have Posted Information Banned from Distribution, it should immediately restrict access to any such information that it contains. Otherwise, the host and internet providers will face fines in the amounts of 1,500-2,000 AZN for officials and 2,000-2,500 AZN for legal entities.
Si un recurso de información de internet entra a la Lista de Recursos de Información que ha publicado información prohibida de distribución, inmediatamente debe restringir el acceso a la información que contiene. De otra manera, los proveedores de alojamiento y de internet enfrentarán multas por un monto de 1,500-2,000 AZN (US$887-1,180) para funcionarios y 2,000-2,500 AZN (US$1,180-1,480) para personas juridicas.
Los funcionarios no han indicado cómo los sitios web que admiten comentarios de los lectores o publicaciones de usuarios (como Facebook o YouTube) cumplirán esas reglas, si sus usuarios publican contenido que cae dentro de la prohibición.
La prohibición abarca una clase de contenido conocida como «información prohibida», que se estableció a partir de una orden judicial de mayo de 2017 que autorizaba al Gobierno a censurar sitios web con contenidos específicos.
De acuerdo con la orden judicial, la «información prohibida» puede incluir las siguientes categorías:
- propaganda de terrorismo;
- información que promueva extremismo religioso, revolución, disturbios masivos y otra propaganda similar;
- [información relativa a] secretos de Estado;
- información sobre producción de armas y repuestos;
- información sobre preparación de narcóticos, drogas y sustancias similares, venta;
- pornografía (incluida pornografía infantil);
- información sobre promoción de juego y apuestas ilegales;
- información sobre inspiración para suicidas;
- insulto y difamación, e información que atente contra la seguridad personal;
- información que atente contra derechos de propiedad intelectual; y
otra información cuya distribución esté prohibida por la ley de la República de Azerbaiyán
La fiscalía afirmó que los recursos en línea fueron bloqueados por suponer una amenaza –pero si se mira de cerca el contenido que se difunde en estos sitios web, encontramos que no entran en el criterio de «información prohibida».
Varios sitios web bloqueados incluían principalmente historias sobre corrupción en el Gobierno, aumento de tasas de suicidio en Azerbaiyán, deficientes condiciones de vida económicas y sociales, y cobertura de noticias independiente de protestas locales. Tres sitios web de noticias y dos canales de televisión satelital fueron bloqueados rápidamente dentro del país. Y desde entonces, más de una docena de recursos en línea que brindan noticias e información independiente han quedado bloqueados.
Todo esto trae la pregunta: ¿para quién es más amenazadora esta «información prohibida»?
Ciertamente, estas reformas legales amenazan a todos, menos a la élite gobernante de Azerbaiyán. Esta es una característica clásica del régimen de Aliyev. En los años desde que sucedió en el trono presidencial a su padre, Ilham Aliyev solamente ha hecho más miserable la vida de sus compatriotas.
Parece que las reformas legales en Azerbaiyán nunca se proponen a partir de la buena voluntad de los parlamentarios azerbaiyanos. Aunque su propósito principal es servir al público, como ciudadanos azerbaiyanos ni siquiera sabemos con certeza si son elegidos legítimamente para un cargo público.
Y no sorprendió ver la segunda parte de reformas legales que el Parlamento azerbaiyano presentó y aprobó cuando se acercaba el final de 2017. Los legisladores aprobaron enmiendas al Código de Ofensas Administrativas de Azerbaiyán, que impone altas penalidades monetarias a los dueños de recursos de información de internet o dominios por distribuir información prohibida (que así consideren las autoridades) o por no evitar la difusión de esa información. El 15 de diciembre, el Parlamento Nacional de Azerbaiyán aprobó reformas al proyecto de ley sobre fuerzas armas, que prohíbe a los periodistas buscar en algunos tipos de información sobre actividad militar.
Las organizaciones y plataformas que han sido afectadas por esta reciente ola de medidas regulatorias dependen cada vez más de sus páginas de Facebook y cuentas de YouTube para que sus voces sigan en línea. Muchos han creado sitios web espejo donde siguen informando sobre historias y noticias críticas de Azerbaiyán.
Azadliq Radio, el servicio azerbaiyano de Radio Europa Libre/Radio Libertad actualiza a sus lectores y espectadores al final del resumen diario de noticas, y ofrece una URL actualizada para su plataforma. Meydan TV depende de una aplicación móvil.
Describiendo la caída de internet libre en Azerbaiyán, el activista cívico Ali Novruzov escribió en su blog:
What made the matter worse was that our even hypothetical Internet freedom was not guaranteed in the law books. Loose provisions of the laws were leading to occasional blocking of websites. Aside from some satirical blogs and Iranian-sponsored religious propaganda websites, even Imgur, an innocent photo-sharing platform fell a victim for a short time. However, blocking of websites was an exceptional measure back then. Despite being an arbitrary measure, the government was resorting to it only in selected circumstances.
[…]
With oil prices plummeting and economic situation getting worse on daily basis, it was evident that the government was no longer inclined to tolerate any dissent whether it was online or offline. The days of the hypothetical free Internet were also numbered.
[…]
While curbing basic rights and freedoms, going after activists, are a rule of thumb when it comes to persecution of active members of Azerbaijan's civil society, polishing of existing laws seem to have made things far easier for the ruling government especially when it needs to answer in front of the international rights watchdogs and institutions. First it is none of their business leaders like to say, even when a pinch of criticism is steered their way, and secondly, we have laws, according to which the authorities lawfully abide by.
Lo que empeoró la cosas fue que ni nuestra hipotética libertad de internet estaba garantizada en los libros de derecho. Disposiciones imprecisas de las leyes llevaron al ocasional bloqueo de sitios web. Además de algunos blogs satíricos y sitios web de propaganda religiosa con apoyo iraní, hasta Imgur, plataforma de intercambio de fotos, fue víctima por breve plazo. Sin embargo, el bloqueo de sitios web era una medida excepcional entonces. A pesar de ser una medida arbitraria, el Gobierno la usaba solamente en circunstancias seleccionadas.
[…]
Con el desplome de los precios del petróleo y la situación económica que empeora a diario, era evidente que el Gobierno ya no se inclinaba a tolerar la discrepancia, en línea o fuera de línea. Los días de la hipotética internet libre también están contados.
[…]
Mientras la represión de los derechos y libertades básicos, perseguir activistas sea regla general cuando se trate de perseguir miembros activos de la sociedad civil de Azerbaiyán, pulir las leyes existentes parece haber facilitado mucho las cosas para el Gobierno, sobre todo cuando necesita responder ante supervisores internacionales de derechos e instituciones. Primero, no les importa, como a sus líderes de negocios les gusta decir, aunque haya una mínima crítica, y segundo, tenemos leyes, según las cuales las autoridades cumplen legalmente.
Estas recientes reformas legales, así como el actual espectáculo de poder entre autoridades y la disminuida sociedad civil de Azerbaiyán, indican que lo que dice el presidente Ilham Aliyev sobre la libertad de expresión y de internet son solamente palabras. En Azerbaiyán, libre y abierta es algo que internet no es.